En su columna (ayer) de «El Mercurio», don Juan Alberto Pizarro nos plantea que la carga tributaria de 2023 es la misma que antes, a pesar que las reformas tributarias de los últimos años han subido el Impuesto de Primera Categoría de 20 a 27%.
Citando a Laffer, plantea que si sube la tasa, pero la base donde se aplica cae, no se recauda más. El tema es ver por qué cae la base. Se enfatiza que es porque no hemos crecido. Esto es muy cierto, y es un tremendo problema.
El autor argumenta que la gran empresa, así como las pymes están asfixiadas por el alza del impuesto corporativo y por eso no crecen y pagan menos impuestos. En este punto no se menciona que para las pymes su tasa corporativa ha estado en 10% en los últimos años, considerablemente por debajo de lo que era prerreformas.
Ahora, para las grandes empresas, estando de acuerdo en que su tasa de 27% es unos puntos alta, la base potencial donde se aplica esta tasa, entendida a grandes rasgos como el producto de Chile (PIB) menos lo que se paga a los trabajadores, no ha cambiado.
Luego, ¿por qué con el 27% en 2023 recaudamos lo mismo que con el 20% de 2014? Una posible razón es que las utilidades de las empresas son mucho más cíclicas que la actividad económica. En 2023 estuvimos en la parte más baja del ciclo económico (crecimos casi nada), luego la recaudación por este motivo debe ser más baja respecto del PIB.
Otra posible razón, que sugiere la columna, correctamente, es que la mayor tasa indujo una mayor informalidad y luego una menor recaudación. Esto no se podría atribuir a una tasa corporativa alta para las pymes, su tasa bajó.
Tampoco ha crecido el empleo informal entre 2014 y 2023 (no tengo a la mano otros indicadores). Luego, la evasión que se alude no podría ser más que de las grandes empresas. Pero tendría que ser un tremendo aumento en la ilegalidad en la declaración de ganancias por parte de las grandes empresas, me cuesta creerlo.
Una razón, que quedaría entre otras, es que si la caída no se debe a un tema cíclico, sería un cambio importante en cómo se declaran los gastos tributarios, esto con un potencial aumento en la elusión. Este es un tema que no se menciona en la columna, pero que creo que es clave despejar. Siguiendo este punto, creo que las normas antievasión y elusión que se discuten hoy en el Congreso van en la línea correcta y deben salir lo antes posible. (El Mercurio Cartas)
Alejandro Micco
