Durante la jornada de este sábado se realizó la Junta Nacional de la Democracia Cristiana(DC), la que estuvo marcada por la crisis que enfrenta la falange luego de los resultados obtenidos en las elecciones presidenciales de 2017.
En la junta, la presidenta interina del partido, Myriam Verdugo, y su mesa directiva, presentaron la renuncia a sus cargos. “En este cuadro de dolor, derrota, amargura, de críticas cruzadas, esta mesa acordó presentar ante ustedes, esta Junta Nacional, su renuncia para que se inicie un proceso de renovación partidaria”, informó Verdugo en su discurso.
Además de presentar la renuncia, Verdugo hizo una crítica a la DC. “Claramente fallamos todos. De nueve integrantes de la mesa quedamos seis, tras vivir un proceso difícil y doloroso para a cada uno de nosotros con varios episodios críticos y después de una derrota electoral”.
En caso de que la Junta acepte la renuncia de los directivos, se abrirá un plazo de 90 días para que se efectúen elecciones.
CRISIS INTERNA
Luego de haber fracasado en la carrera presidencial, la DC entró en un estado de “revalidación”. Antes de que se llevara a cabo la junta, se presentó un voto político que plantea la necesidad de revalidación y reposicionamineto del partido en nuevos ideales.
En ese sentido, la DC debe enfrentar una “crisis electoral, política y de respeto interno”, según Verdugo, lo que validaría la masiva fuga de militantes de la falange. Entre los meses de enero y noviembre de 2017, alrededor de 3.000 personas se desligaron del partido.
“Un gran dolor todas estas pérdidas, pero como dijimos en nuestra declaración como mesa, esperamos que el tiempo nos permita reencontrarnos en la tarea de construir un Chile más justo y solidario bajo la iluminación del humanismo cristiano”, agregó.
Siguiendo esa línea, el voto político presentado señala que “este proceso es muy peligroso y se funda en una frustración respecto al posicionamiento del PDC y a la virtual inexistencia de una verdadera comunidad cívica en su interior”.
Además, Verdugo explicó que distintas creencias de actores de la DC de que “el partido se situaba muy a la izquierda, otros, que se había derechizado“, ponía en evidencia “nuestra falta de definiciones e incapacidad de resolver las diferencias”.
E hizo un llamado para ser una oposición ‘constructiva’. “La ciudadanía decidió que sea la derecha la que gobierne por los próximos cuatro años. Nos puso claramente en la oposición, una oposición que, por el bien del país, debe ser inteligente y pensando en Chile y su gente“, expresó.
Finalmente, la ex timonel de la DC propuso la realización de un congreso ideológico que llevará por nombre “Radomiro Tomic” y que será presidido por el ex Presidente de la República y militante DC, Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
Se espera que el congreso se ponga en marcha en marzo de este año, y “solo una vez que hayamos sido capaces de un proceso participativo y democrático, de encontrar las respuestas y caminos, después de eso podremos pensar en alianzas políticas y electorales. Antes, sería suicidio“, sentenció Verdugo.
POSTULACIÓN DE UNDURRAGA

Durante la Junta Nacional de la Democracia Cristiana (DC), el Ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, reiteró su disposición a competir por la presidencia del partido en el marco de la renuncia de la mesa directiva encabezada por Myriam Verdugo.
“Sí, yo he manifestado que estoy dispuesto a competir por la presidencia del partido en la medida que seamos capaces de convocar a sectores moderados y progresistas”, afirmó, pero siendo el propósito principal “recuperar el centro, pero en diálogo con la centro izquierda”.
“No es coherente, no es consecuente marcar una distancia con quienes han sido nuestros aliados en este proceso de trasformación de Chile”, explicó.
En ese aspecto, el ministro comentó que el proceso de elecciones de la DC “no termina hoy, pero parte por hacer la autocrítica de lo que significa haber perdido una elección”.
Frente a lo que viene, Undurraga manifestó que “a partir del 11 de marzo, la DC es un partido de oposición. Lo fundamental que tiene que hacer es volver a sus raíces. Y, al volver a sus raíces, hacer un esfuerzo por recuperar, reencantar a toda esa gente que antes votaba por nosotros”.
VOTO POLÍTICO

En horas de la tarde de ayer llegó hasta la secretaría nacional de la Democracia Cristiana un voto político al que adhieren más de cien militantes, la mayoría de ellos dirigentes históricos, ex autoridades de gobierno, consejeros y presidentes regionales, además de parlamentarios en ejercicio y electos.
El texto, al que tuvo acceso La Tercera, se presentará durante la Junta Nacional del partido convocada para hoy y expone una serie de reflexiones sobre el actual proceso de crisis que vive la DC. En él se plantea la necesidad de “revalidar” y “reposicionar” al partido en un ideario “nuevo”, “humanista”, “reformista” y de “centro”, además de ejercer una oposición “constructiva” y “propositiva” frente al gobierno de Sebastián Piñera.
Entre sus firmantes destacan los actuales senadores Patricio Walker y Manuel Matta; los abogados constitucionalista Jorge Correa Sutil y María Pía Silva; los ex ministros Soledad Alvear, Jorge Burgos y José Pablo Arellano; el ex presidente DC Gutenberg Martínez; los diputados Jorge Sabag y Joanna Pérez (electa); la ex consejera nacional Isabel Aylwin; el presidente en Las Condes, Jorge Frei; la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao y la jefe de gabinete de Carolina Goic, Claudia Silva.
En el documento se califica, en primer lugar, “como una clara derrota política del Gobierno de la Presidenta Bachelet, de la Nueva Mayoría y en particular de la DC, los resultados electorales presidenciales y parlamentarios”.
En esa línea se añade que tras los comicios de noviembre se ha “acentuado la crisis que ya venía en desarrollo en el PDC”. Del mismo modo, se valora la campaña presidencial de Carolina Goic y de quienes compitieron en las parlamentarias. En ese sentido, se afirma que entre los motivos que llevaron a los malos resultados figura “la falta de apoyo interno a la candidatura presidencial, la incapacidad de la estructura de completar las listas parlamentarias y con la debida anticipación, el deterioro de la convivencia interna, la falta de fraternidad y disciplina (…) y la primacía de proyectos individuales por sobre la misión comunitaria, que impiden una presencia orgánica, moderna y efectiva de la DC en la realidad nacional”.
A ello se suma, dice el texto, “la existencia de procesos como la ‘retroexcavadora’ y la izquierdización de la agenda política de la Nueva Mayoría y del Gobierno”. Sin embargo, se precisa, que se valoran los avances logrados en la actual administración.
En el documento también se cuestiona el proceso de refichaje de la colectividad, así como también la renuncia de militantes en el último tiempo. “Este proceso es muy peligroso y se funda en una frustración respecto al posicionamiento del PDC y a la virtual inexistencia de una verdadera comunidad cívica a su interior”, se indica.
CONCLUSIONES
Las conclusiones del texto van en la línea de definir el rol que debe cumplir la Democracia Cristiana a futuro. De esta manera, se invita a “iniciar un proceso de revalidación del PDC como el instrumento partidario al servicio del ideario demócratacristiano, que supone el reposicionamiento partidario, en la línea de la campaña presidencial de primera vuelta, conceptualizando el eje de esta decisión, como ‘Un Nuevo Centro Humanista y Reformista’”.
Asimismo, se añade que “esta tarea deberá encabezarla una nueva directiva, que de acuerdo a los procedimientos legales y estatutarios, esta Junta Nacional acuerda ser elegida en abril de 2018”. Con esto último, además, toman distancia con los planteamientos que buscaban aplazar las elecciones.
Respecto del futuro de la tienda, se recalca que la DC se encuentra en la oposición, pero desde la perspectiva de una “oposición constructiva y propositiva, que evaluará en su mérito las propuestas del Ejecutivo, teniendo como parámetro el bien común”.
Asimismo, rechazan la posibilidad de seguir en la Nueva Mayoría y de llegar a acuerdos con el Frente Amplio. “Se demostró que los acuerdos, en que conviven diferencias en conceptos básicos y en la estrategia central, no tienen buenos resultados, para el todo, las partes y el bien común”, se señala. Por el contario, dicen que “se concede el amplio espacio del centro a otros, otorgando una ventaja (…) a la derecha”.
Por último, se concluye que la DC debe “buscar acuerdos políticos preferentes con sectores de pensamiento social demócrata, social liberal e independientes comprometidos con los DDHH, la democracia y el crecimiento con equidad”.
NOLBERTO DIAZ: «DOBLE MILITANCIA»

Este sábado se desarrolla una Junta Nacional de la Democracia Cristiana, donde pretenden definir el futuro del partido y generar un reordenamiento que les permita salir del hoyo electoral, que los dejó con un quinto lugar en las presidenciales y una baja importante de parlamentarios. En medio de esto, además, aparecen denuncias contra uno de sus más reconocidos dirigentes.
Se trata de uno de los miembros del Consejo Nacional de la falange, quien además es Secretario General de la CUT y presidente del Sindicato de Trabajadores del Petróleo de ENAP: Nolberto Díaz, reconocido líder gremial que ha recorrido las calles exigiendo mejoras laborales junto personajes como Bárbara Figueroa y Arturo Martínez.
Las denuncias, a las que tuvo acceso El Dínamo, apuntan a su “doble militancia” al interior de la DC y como dirigentes sindical, lo que según un grupo de militantes del partido -quienes hicieron la denuncia- incurriría en una ilegalidad. Esto porque el artículo 23 de la Constitución Política de Chile afirma que “son incompatibles los cargos directivos superiores de las organizaciones gremiales con los cargos directivos superiores, nacionales y regionales, de los partidos políticos”.
En esa línea, la acusación contra Nolberto Díaz llegó en octubre pasado hasta la Contraloría General de la República, a la Gerencia de Compliance (Ética y Cumplimiento) de ENAP y al Tribunal Supremo de la Democracia Cristiana, aunque sin pronunciamientos de ningún tipo hasta el momento.
Díaz ha estado involucrado en una serie de polémicas al interior de la empresa estatal, tras su ingreso en el año 2000. En ese momento fue denunciado por el sindicato de empleados de Magallanes quienes alegaron que su contratación tenía fines políticos luego de perder una elección a diputado por Magallanes.
En noviembre pasado, el dirigente protagonizó un bochornoso episodio cuando se enfrentó a golpes con un alto ejecutivo de ENAP, Alfredo del Carril, en medio de un directorio. Un hecho que llamó la atención fue que el propio Díaz decidió demandar al directivo tras esto, por practicas antisindicales, pidiendo una indemnización de 266 millones de pesos.
Entre quienes lo defendieron estuvo el diputado DC Matías Walker, quien escribió en Twitter tras el incidente: “Todo nuestro apoyo a @NolbertoDíaz. Yo le creo a él. Su trayectoria en defensa de los derechos sindicales lo avala”.
Consultado por este tema por El Dínamo, Díaz -quien se encuentra en medio de la Junta de la DC- descartó dar alguna declaración. “No me interesa opinar, hay cosas más importantes”, aseguró.
Según la ley, corresponde a los Tribunales Electorales Regionales el incumplimiento del artículo 23 de la Constitución, donde el dirigente sindical arriesga la pérdida de su cargo directivo en la Democracia Cristiana y el pago de una multa. (La Tercera-El Dínamo)



