Las personas en el centro

Las personas en el centro

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Los acontecimientos de la última semana tienen a la gran mayoría de los chilenos en un estado de perplejidad, angustia e incertidumbre, el que requerirá —en gran parte— humildad y capacidad de escucha para comprender y abordar con seriedad el desarrollo de lo ocurrido. La complejidad de la situación exige cambios fundamentales para acortar las brechas de desigualdad y mejorar la calidad de vida de un gran número de chilenos. Es la oportunidad de que todos —sin excluir a nadie— colaboremos para hacer de Chile un país más pleno, próspero y feliz. Más que esperar las reformas legislativas que ha propuesto el Gobierno, las empresas pueden adelantarse implementando cambios en conjunto con sus trabajadores.

Una de las inequidades está en los ingresos. Según la OCDE, desde 1980 el crecimiento económico ha aumentado tanto como la desigualdad en los ingresos, teniendo por resultado que los beneficios del desarrollo económico han estado orientados a una parte acotada de la población. Chile, junto con México, es el país de la OCDE que registra la mayor desigualdad de ingresos (0,46 en el índice de Gini en el año 2018). Si bien se han realizado cambios institucionales importantes y un aumento del gasto social, las brechas de inequidad siguen siendo relevantes. Muestra de ello es que la mediana de ingresos en Chile es de 400 mil pesos, tan solo 25% más que el sueldo mínimo.

Uno de los escenarios propicios para reducir las brechas en remuneraciones son las empresas, sea cual sea su tamaño. Desde la Fundación Carlos Vial Espantoso hemos recabado evidencia que señala que invertir en el desarrollo de los trabajadores, particularmente en compensaciones y beneficios, tiene un impacto positivo en los resultados financieros de las organizaciones. Aumentar los ingresos es clave y es el camino para dinamizar el desarrollo de las empresas y el crecimiento del país.

Como Fundación Carlos Vial Espantoso nos hemos trazado como objetivo fomentar las buenas prácticas laborales, y en particular el mejoramiento de los ingresos a través de la participación en resultados y beneficios de los trabajadores. Para ello, es fundamental la evaluación de las empresas. Llevamos 20 años midiendo la gestión de personas en las empresas mediante los Premios Carlos Vial para las grandes empresas y pymes. La metodología de evaluación permite que las organizaciones tengan un catastro de cómo se encuentran respecto de sus pares de la misma industria, tamaño y territorio, para así poder tomar acciones concretas para elevar los estándares de calidad de vida y disminuir la brecha salarial. Asimismo, la medición permite el intercambio de buenas prácticas laborales, específicamente respecto de compensaciones, beneficios y reparto de utilidades.

El entorno de las empresas presenta una oportunidad importante para hacerse cargo de los desafíos que atraviesa el país, y un primer paso puede ser la medición de las organizaciones para llevar a cabo acciones directas y concretas que pongan a los trabajadores en el centro de su crecimiento. (El Mercurio)

María Isabel Vial

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