«No hay ningún estudio que justifique esta intervención masiva al sistema y eso es lo que hemos planteado como tremendamente peligroso», aseguró el presidente de la Asociación de Notarios, Conservadores y Archiveros de Chile, Alfredo Martin, quien se ha mostrado contrario a la creación 101 nuevas plazas para notarios y conservadores de bienes raíces anunciadas por el ejecutivo.
En consecuencia, dicho gremio realizó un estudio publicado por La Tercera el cual abordó las razones detrás de la implementación de estas nuevas notarías en 13 de las 15 regiones del país, reiterando así los cuestionamientos por la decisión del Gobierno.
Según el documento de la agrupación, esta iniciativa anunciada en agosto por el ministro de Justicia, Jaime Campos, «no contó con el beneplácito espontáneo de todas las Cortes de Apelaciones del país, ni tampoco es el resultado de estudios que se hayan conocido o de un proceso de revisión y cruce de datos que hayan considerado las variables internas y externas que ello requiere».
En esa línea, el texto señaló que que estos nuevos nombramientos debieron responder a una serie de criterios, como el promedio de habitantes por notaría; la proyección de crecimiento de la población; los servicios públicos presentes en la comuna; su actividad económica, y el requerimiento de actuaciones notariales. Cuestiones que supuestamente no habrían sido tomadas en cuenta por el Gobierno antes de realizar el anuncio.
CONCLUSIONES
Las conclusiones del estudio apuntaron a que un análisis realizado en 2006 por la Corporación Administrativa del Poder Judicial, que fijó en 60 mil personas el promedio máximo de usuarios por notaría.
Sin embargo, la Asociación de Notarios advierte que 40 mil habitantes es una cifra más realista. O sea, si hay esa cantidad de personas se justificaría la creación del oficio.
En este sentido, destacó el texto, «25 de las 34 comunas en que se establece una primera notaría (73%) tienen menos de 40 mil habitantes mayores de 18 años», que son quienes pueden realizar trámites. «De estas 25 comunas, siete se ubican a menos de 10 kilómetros de distancia de la notaría más cercana», añadió el informe.
En tanto, el análisis afirmó que «por lo menos en 15 de las 34 comunas en que se crean primeras notarías, la combinación del número de habitantes mayores de 18 años, actividad económica y el acceso (medido como distancia previa al decreto a notaría más cercana) no justificarían la creación del oficio»
Así, otro de los argumentos para desestimar la decisión del Gobierno es que «se aprecia un criterio disparejo para la generación de nuevas notarías en comunas donde el servicio ya existía (…) «En 21 comunas, estando sus promedios dentro de los estándares, se crean más notarías de las necesarias, lo que altera el promedio».
Considerando lo expuesto, Martin aclaró que «lo que nosotros queremos es que exista una política pública que determine, con un estudio serio y acotado, cuando es necesario crear una notaria». (Emol La Tercera)
