El presidente chino, Xi Jinping, sustituyó a los dos generales desaparecidos que habían estado al mando de sus fuerzas de misiles, confirmando así la mayor purga en la cúpula militar en una década.
El general Li Yuchao, comandante de la Fuerza de Cohetes del Ejército Popular de Liberación (ELP), y su adjunto, el general Liu Guangbin, desaparecieron de la escena pública hace varios meses en medio de lo que, según expertos extranjeros y funcionarios de inteligencia, es una campaña para acabar con la corrupción y reforzar la disciplina del Partido Comunista.
Los medios de comunicación estatales dijeron este lunes que Wang Houbin, subcomandante de la Armada del EPL desde 2020, era ahora el jefe de la Fuerza de Cohetes, el brazo responsable de los misiles balísticos nucleares con base en tierra. Xu Xisheng, oficial de la Fuerza Aérea y miembro del Comité Central del partido, fue nombrado nuevo comisario político de la fuerza.
Beijing no ha hecho ningún anuncio sobre el paradero de Li y Liu, pero funcionarios extranjeros informados sobre el asunto creen que los dos generales están siendo investigados por la presunta filtración de secretos militares.
La reorganización se produce en medio de una serie de anuncios sobre nuevas medidas anticorrupción en las Fuerzas Armadas y un renovado impulso para garantizar la lealtad absoluta del ejército al partido y al propio Xi. (FT-DF)
