Revive proyecto de «infraestructura crítica» como Plan B para el Gobierno

Revive proyecto de «infraestructura crítica» como Plan B para el Gobierno

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La “caja de herramientas” es el concepto que se usa en el ámbito de seguridad y defensa, para definir el conjunto de medidas con las que cuenta una autoridad para hacer frente a amenazas.

El senador independiente-RN, Kenneth Pugh comentó que esa es la idea de la reforma constitucional sobre “infraestructura crítica”, que comienza a concitar apoyos desde el PS a la UDI y que permitiría al Presidente Gabriel Boric destinar rápidamente a militares para resguardar espacios públicos y lugares estratégicos.

El debate de esta reforma -de autoría de Pugh y la senadora de La Araucanía, Carmen Gloria Aravena, que en su momento también fue barajada como alternativa por Sebastián Piñera en el contexto del estallido social-, se reactivó este miércoles en una comisión mixta, creada para resolver discrepancias entre la Cámara y el Senado.

Si bien originalmente la idea del gobierno era usar esa reforma para proponer una nueva fórmula de participación de militares en tareas de orden público y seguridad interna, finalmente el Ejecutivo desechó esa posibilidad y optó por volver a decretar un Estado de Excepción Constitucional de Emergencia para La Araucanía y el Biobío, mecanismo que ya se había usado en el pasado por la administración de Piñera.

La decisión de La Moneda se debía a la tensión que generaba legislar sobre esta materia, ya que parlamentarios del PC y del Frente Amplio tenían reparos con legislar un nuevo mecanismo de intervención militar. Ello obligó al gobierno a no innovar y recurrir a los instrumentos existentes en la Carta Fundamental.

No obstante, el estado de excepción decretado por el Presidente necesariamente requerirá del consentimiento del Congreso al cabo de 30 días, por lo que nuevamente las dos coaliciones oficialistas volverán a tensionarse, ya que el PPD y el PS respaldan la decisión, mientras las fuerzas del PC y el Frente Amplio mantienen su resistencia.

La senadora UDI, Luz Ebensperger, quien integra en representación de su partido la comisión mixta sobre “infraestructura crítica”, le pidió el martes al presidente de la instancia, el DC Matías Walker, que no suspendiera la citación de este miércoles, a pesar de que La Moneda ya había tomado una estrategia distinta.

“Este proyecto es independiente de la decisión política que se tomó para La Araucanía. Es una buena herramienta”, dijo Ebensperger, quien agregó que al margen del proceso constituyente, que podría incluso suprimir este nuevo mecanismo, “la obligación de este Congreso es legislar lo que estime pertinente”.

El senador Pugh, añadió que el proyecto original tiene una base distinta a lo que pretendía La Moneda, que era generar un “estado excepcional intermedio”, es decir, con mayor control civil y con mayores delimitaciones. Explicó que su idea es que el gobierno disponga de los resguardos con la fuerza militar, “cuando el sistema de inteligencia detecta una amenaza real”.

De hecho, en esencia, los estados de excepción constitucional son fórmulas jurídicas que restringen derechos y garantías como el libre tránsito o las reuniones, bajo la disuasión de las fuerzas militares.

No obstante, la idea de la reforma “infraestructura crítica” no es restringir derechos, sino que solo disponer de los medios y el personal de las FF.AA. en circunstancias especiales.

Otra diferencia es que el estado de excepción implica un trámite administrativo ante Contraloría y, en algunos casos, el consentimiento del Congreso. En este caso, dependería solo de una decisión política, ya que se busca una reacción rápida.

El diputado socialista Leonardo Soto, quien es parte de la comisión mixta, dijo ser partidario de continuar con la discusión, pero que hay que dar espacio suficiente a un acuerdo. “Este gobierno necesita ayudas y herramientas y hay que evaluar”, expresó.

El diputado DC Eric Aedo, también integrante de la mencionada comisión, agregó que “vale la pena que se avance en este proceso de establecer estos estados intermedios o de resguardo de infraestructura crítica”.

En todo caso, esta tarde concurrió a la comisión el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Giorgio Jackson, además de la ministra del Interior, Izkia Siches, para exponer la visión del Ejecutivo. En la ocasión, ambos secretarios de Estado informaron que el gobierno no presentaría una propuesta.

“No insistiremos en la presentación de indicaciones. Sin perjuicio de lo que aquí se acuerde, creemos prudente que, ante la eventualidad de un cambio en la Constitución (a raíz del proceso constituyente), esperar ese suceso”, dijo Jackson.

A su turno el senador PPD Jaime Quintana planteó que el debate debiese ser desideologizado y que no debe ser pensado como una medida solo para La Araucanía, por ello, llamó a considerar esta reforma para enfrentar amenazas. “El Presidente hizo lo que tenía que hacer con las herramientas que tenía (al decretar estado de excepción) pero mi temor es que nos quedemos cortos”, dijo.

En tanto, el diputado RN Andrés Longton propuso mandatar a equipos técnicos para que elaboren una propuesta para la próxima sesión.

La postura disidente en la comisión la expresó el diputado RD Jorge Brito, quien cuestionó la tendencia de usar a Fuerzas Armadas en tareas internas.

Al final de la sesión de este miércoles, el senador Walker propuso un plazo de dos semanas para tratar de llegar un acuerdo o en su defecto votar una propuesta.

En todo caso, si los parlamentarios de la derecha, la DC, el PPD y el PS llegan a un acuerdo, con ello lograrían una mayoría casi unánime para proponer una iniciativa al resto del Congreso.

ACUERDO PARA CONTINUAR TRAMITACIÓN

«Se requiere mucho esfuerzo para llegar a los consensos en esta materia», dijo el ministro Secretario General de la Presidencia, Giorgio Jackson en relación a la tramitación que buscan llevar adelante los parlamentarios de la comisión que revisa el proyecto de infraestructura crítica.

Esto luego de que el propio Ejecutivo pidiera a los parlamentarios llamar a constituir la comisión y luego solicitar que se deje sin efecto la sesión que estaba fijada para este lunes.

Esta jornada Jackson mostró la postura del Gobierno en la materia. Y es que, luego de decretar el estado de excepción, aseguran que no presentarán una nueva fórmula y, de hecho, creen que los parlamentarios debieran esperar a saber el resultado del Plebiscito del 4 de septiembre para no perder los esfuerzos para lograr los consensos en esta materia, de aprobarse la nueva Constitución.

«Nos parecía importante, si es que se iba a generar un trabajo para poder llegar a algún nivel de consenso en infraestructura crítica, que ese trabajo no tuviera chances de ser desechado», dijo Jackson.

Sobre eso, todos los parlamentarios de la comisión, menos Jorge Brito (RD), cuestionaron esa postura, mencionando que ellos no dejarán de legislar por estos tres meses que faltan para la votación.

El presidente de la instancia, el senador DC Matías Walker puntualizó que «mientras este Congreso Nacional exista va a seguir cumpliendo con el mandato que nos dio la ciudadanía», agregando que «si llevamos la discusión a ese nivel, yo también podría decirle que el estado de emergencia que acaba de decretar el presidente de la república tampoco está contemplado en la propuesta de la nueva constitución entonces tampoco podría aplicarse después del 4 de septiembre. Porque además la propuesta de la convención se puede aprobar, pero también se puede rechazar y nosotros tenemos que ponernos en ambas hipótesis».

El senador socialista, Alfonso De Urresti también se pronunció frente al tema. «Yo no comparto lo que decía el ministro Jackson respecto de esperar la nueva constitución”, y mencionó que “no hay que eludir la discusión. Estoy disponible a discutirlo y a no esquivar el bulto de la discusión».

Por su parte, el diputado Jorge Alessandri (UDI) mencionó que «el ministro secretario general de la presidencia nos notifica de que no podemos o no debemos seguir legislando hasta que esté lista la próxima constitución en cuatro meses, y él es el ministro que lleva las relaciones con el parlamente, por lo tanto, si cierra el parlamento el queda sin pega».

Según mencionó el senador Walker, la idea es que luego de la próxima semana -que es territorial- los parlamentarios lleguen con propuestas para analizarlas y deliberar para llegar a un acuerdo en la comisión. (La Tercera-Emol)

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