Nuestros tiempos: renovación de la DC

Nuestros tiempos: renovación de la DC

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¿Cómo hacemos para que estos tiempos sean nuestros tiempos ?

Esa fue la constante pregunta que se hizo en la Junta Nacional del Partido Demócrata Cristiano (PDC), realizada el pasado sábado 29 de abril.

Interesante. Esa pregunta fue hecha por todos los discursantes,  sin distinción de visión política .

La idea de recuperar los tiempos para y por el ideario DC, fue lo que hizo que la propuesta Goic fuese aprobada por 63,11% de los votos esa noche, un triunfo indesmentible por lo macizo y claro.

El PDC renacía a su vida nueva: valores fundacionales, renovación, identidad propia.

Como expresa Carolina Goic: “Hoy nos paramos como alternativa real para gente moderada, que quiere el encuentro”.

Esa es la idea: construir futuro con todos.

Era entonces la vuelta del péndulo: uno que iba desde una tensión izquierdizante,  confusa, contradictoria, inaugurada en 2009 -2010, para  regresar al centro del espectro político hoy.

La verdad es que el fenómeno de Nueva Mayoría -la que nunca fue una verdadera coalición- le hizo mal a la DC .

Y ese fue el mensaje de fondo que centenares  de delegados fraternales y votantes trajeron al cónclave de Santiago; entregando macizo apoyo a la primera vuelta, y al resto de propuestas de la directiva.

Acto y ambientación con discursiva democrática respetuosa -a veces apasionada -que me devolvió, en lo personal,  el entusiasmo por el partido.

Ahora militantes, simpatizantes e independientes de todo tipo, se volcarán a hacer realidad el nuevo sueño DC: ganar la Presidencia de la República de Chile, y asegurar adecuada representación parlamentaria.

¿Razón para ganar ?

Hay al menos tres -entre muchas- razones plausibles.

Tenemos hoy la mejor candidata del espectro político nacional ( trayectoria de vida, ética personal, ideas progresistas);  es una candidata mujer, joven, de región extrema.

Además hicimos los mejores gobiernos de los últimos 50 años:  Eduardo Frei Montalva; Patricio Aylwin Azócar y Eduardo Frei Ruiz-Tagle.

Eran marca eficaz del centro verdadero, del crecimiento con equidad, con cambios sociales.

Soy optimista. Se puede llegar a ganar. Para  encauzar al país hacia un camino de fraternidad, de acogida, en la tarea común, alejándose de sectarismos.

Chile en historia bien larga es: acogida , fraternidad, y progreso .

El resto es confusión, ofertones, promesas de fantasía.

Es mejor desde el centro y con los pies en tierra firme. (La Tercera)

Eduardo Aninat

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