Pasadas las 20:00 horas del lunes y con una exclusiva cena privada en el Museo Histórico y Militar de Chile, se inició la XIV versión del «Encuentro empresarial padres e hijos», que reúne a los directores y dueños de compañías más importantes de América Latina y que en esta oportunidad tendrá como sede Santiago.
Al evento -cuyos anfitriones en Chile son las familias Saieh, Solari, Said y Luksic- concurrió la Presidenta Michelle Bachelet y el empresario mexicano Carlos Slim, quienes compartieron mesa junto al ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.
Según indica este martes «El Mercurio», también se tiene contemplada la participación del ex Presidente de Francia, Nicolas Sarkozy. Uno de los primeros en llegar fue Salvador Said Somavía, director de Parque Arauco y Embotelladora Andina, cuyo padre, José Said Saffie, más tarde recibió a la Mandataria.
Luego se integraron Álvaro Saieh (Corpgroup); Andrónico Luksic (Quiñenco), y Piero Solari, empresario miembro de una de las familias controladoras de Falabella. Horst Paulmann -presidente y controlador de Cencosud- participó en la cita sin sus hijos, pero acompañado de sus sobrinos, herederos de su fallecido hermano Jürgen.
Asimismo, llegó al recinto de avenida Blanco Encalada 1550 el ex presidente de Falabella Juan Cúneo junto a su hija Giorgianna.
VERSIóN DEL ENCUENTRO
La Presidenta de la República, Michelle Bachelet, acompañada por el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, participó anoche en la cena que se realiza en el marco del XIV Encuentro Empresarial Padres e Hijos, que reúne a los hombres y mujeres de negocios más importantes de Latinoamérica, con el fin de fortalecer lazos económicos, y cuyos anfitriones en Chile son las familias Saieh, Solari, Said y Luksic.
Tras destacar la importancia de este tipo de reuniones, que permiten debatir sobre el rol de la empresa privada ante los desafíos de las sociedades y economías modernas, la Mandataria también abordó el rol del Gobierno en la materia, afirmando que «avanzar al desarrollo es la razón de las reformas que hemos emprendido», según un comunicado de Presidencia.
La Jefa de Estado se refirió también a la situación actual de la economía, tanto nacional e internacional, afectada por el fin del súper ciclo de los commodities y de cómo se ha enfrentado este escenario: «Hemos puesto al crecimiento económico en el centro de nuestra agenda para el período que viene. Pero tampoco se trata de crecer de cualquier manera, ni podemos hacer más de lo mismo». Y añadió que «aquello que nos permitió crecer de manera acelerada en las últimas décadas, no puede ser ya la única base sobre la que proyectemos el crecimiento futuro, porque ahora requerimos incorporar más capital humano, condiciones más estables de competitividad, y más valor agregado a nuestros productos».
Asimismo, detalló que para hacerse cargo del este problema, su Gobierno puso en marcha la agenda de Productividad, Innovación y Crecimiento, que contempla 47 medidas, 10 proyectos de ley y 37 iniciativas administrativas, con una inversión de US$ 1.500 millones entre 2014 y 2018, de las cuales el 77% han sido cumplidas.
También, explicó que un eje central de esta Agenda son los Programas Estratégicos de Especialización Inteligente, que mediante una articulación público privada identifican las principales brechas productivas en un sector o industria y concuerdan una hoja de ruta con acciones concretas para impulsar la competitividad de su sector.
Desde el punto de vista de la ciudadanía, la Mandataria se refirió a la pérdida de la confianza en los políticos y empresarios, y puso énfasis en que «necesitamos con urgencia fortalecer la confianza social. Necesitamos que el emprendimiento sea prestigiado, que la actividad de invertir, arriesgar, asociarse y crear empleo sea socialmente más valorada. Necesitamos que las personas confíen en que los mercados premian el mérito. Necesitamos que la actividad política sea apreciada para que muchos más quieran participar en ella y que el servicio público sea un honor, para que los mejores lleguen a él. Necesitamos que los ciudadanos confíen en su democracia».
Finalmente, manifestó a los empresarios que «sé que algunos han sentido la incertidumbre que naturalmente provocan los cambios importantes. Pero es de mínima objetividad reconocer que son cambios ineludibles, que avanzan en el marco de la institucionalidad y de la gobernabilidad». (Emol-DF)
