Directora del INE rechaza acusaciones de manipulación del desempleo

Directora del INE rechaza acusaciones de manipulación del desempleo

Compartir

Mayo era el mes en que Ximena Clark, la directora del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), querría estar discutiendo el proyecto de ley que crea una nueva institucionalidad para el organismo, pero la realidad es que en estos días ha tenido que salir a defender la independencia del instituto y, en particular, la encuesta de desempleo.

La polémica amenaza a la reputación del trabajo técnico del INE a dos años de que fuera duramente golpeado por el cuestionamiento a la medición del IPC y el desastre que terminó siendo el Censo 2012, el cual en solo 22 días tuvo que hacer tres correcciones y gatilló la renuncia forzada del entonces director Francisco Labbé.

La polémica actual se centra en la última encuesta de empleo que entregó el instituto.

La encuesta reveló un alza de 60% en el número de personas que se declararon sin deseos de trabajar. Eso se traduce en un aumento de 268 mil personas en relación al mismo periodo de enero-marzo de 2014. Economistas dicen que el cambio en el número de inactivos es relevante, ya que es justamente ese aumento lo que explicaría el bajo incremento en la fuerza de trabajo de los últimos meses y la relativa baja tasa de desempleo justo en medio de una fuerte desaceleración de la economía, que se ha traducido en una baja creación de nuevos empleos.

Críticos afirman que la fuerte alza en el número de personas fuera del mercado laboral habría reducido en un punto el desempleo del INE. La encuesta de marzo lo ubicó en 6,1%. La que realiza la Universidad de Chile apunta a que debería estar en torno al 7%.

El Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la Universidad Católica (Clapes UC) alertó acerca de “particularidades” en los datos de inactivos. El informe afirma que si las variaciones estuvieran “en un rango más normal, la tasa de desempleo nacional sería significativamente mayor”.

La polémica entró en la arena política y han aparecido acusaciones de que las cifras habrían sido manipuladas. Para explicar la encuesta, Clark fue citada por la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados.

El equipo de BBVA Research descarta manipulación y apunta a problemas en la metodología para explicar las “inusuales” cifras. Jorge Selaive, el economista jefe del banco, hizo un estudio preliminar que indica que el problema estribaría en la medición.

El martes, fuentes al interior de INE revelaron a este medio que se estaría contemplando hacer ajustes a la encuesta ante polémica y para ello se habría citado al comité de 30 economistas y usuarios para, durante el jueves de la semana próxima, explicar la metodología, y donde, asimismo, se analizarían los próximos ajustes a realizarse a la encuesta.

Pero ayer, en una entrevista, Ximena Clark respondió a las críticas y salió golpeando. Señaló que no se harán cambios y que el objetivo de próximo Comité de Usuarios y Expertos será para aclarar los alcances que tienen los indicadores de la encuesta y escuchar sugerencias y comentarios. Y la directora del INE fue categórica en afirmar que la encuesta mide bien la tasa de desocupación. De hecho, aseguró que la actual encuesta es más precisa y muestra mejor la variabilidad.

“La vigente Encuesta Nacional del Empleo incorpora las mejores y más recientes recomendaciones internacionales sobre la medición de las estadísticas del trabajo, la ocupación y la subutilización de fuerza de trabajo, las cuales fueron recientemente aprobadas en la última Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo”, se explayó.

Más dura fue con los que sugieren que hubo manipulación de datos en la encuesta: “Cualquier comentario sobre posibles manipulaciones de las cifras o cambios a la encuesta no tienen ningún sustento, siendo meramente especulaciones inapropiadas e imprudentes con otros fines, que no corresponden a un análisis técnico riguroso”.

Calificó a algunos de los comentarios como “imprudentes” y puntualizó que la discusión no debería haber entrado a la arena política.

Clark agregó que no tiene problema alguno en ir al Congreso y aclarar confusiones “que se han originado producto de la errónea interpretación de las variables de esta encuesta”, junto con lo cual planteó que siempre ha presentado y presentará su “máxima disponibilidad para dar a conocer el trabajo que se realiza por parte de los equipos técnicos del INE y para aclarar cualquier duda referida a estas materias”

Afirmó que el objetivo de citar al próximo Comité no es dar a conocer cambios en la encuesta, “los cuales no están contemplados, sino aclarar los alcances que tienen los indicadores de la misma, promoviendo un mayor uso de esta información”.

Clark manifestó que la nula variación trimestral de la tasa de desempleo (6,1% en el trimestre enero-marzo 2014) “se debió a un descenso de la fuerza de trabajo en igual cuantía que la disminución de Ocupados (ambas bajaron en 0,2%), disminuciones que a su vez estuvieron incididas fuertemente por las mujeres, generando que por tercer periodo consecutivo disminuyeran sus tasas de ocupación y de participación”

Y explica que es un error básico hacer una correlación uno a uno y asumir que todos los que salieron de la fuerza de trabajo caerían en la categoría de desocupados.

También desechó argumentos de que el alza de 60% en el número de personas que se declararon sin deseos de trabajar fuera inusual. “Las magnitudes de este movimiento en los inactivos no son muy distintos a los previamente observados en todo el período de vigencia de esta encuesta. Por ejemplo, a mediados del 2012 los inactivos presentaron un aumento anual de 205,0 mil personas en el trimestre junio-agosto. A su vez, a principios del año 2011, se constató una gran disminución de inactivos, lo que equivalió a la entrada de personas hacia la fuerza de trabajo (especialmente mujeres que entraban a la ocupación asociado al aumento del empleo por cuenta propia), alcanzando variaciones negativas de los inactivos de 177,8 mil personas en doce meses”, detalló.

Clark también descartó que las variaciones en el número de las personas que salen de la fuerza de trabajo (y pasan a ser inactivos) sean estadísticamente significativas entre un periodo u otro. “En el último trimestre publicado, correspondiente a enero-marzo 2015, la variación anual fue de 3,0%, lo que implicó un aumento de 167,7 mil personas. Estas variaciones, ya sea trimestralmente o anualmente, no tienen una diferencia estadísticamente significativa entre un periodo u otro, lo cual se explica por el hecho de que los intervalos de confianza de las estimaciones puntuales se solapan (o cruzan) entre ellos. Lo mismo sucede con los datos de inactivos del trimestre previo (diciembre 2014-febrero 2015), cuyas variaciones no son estadísticamente significativas ni trimestralmente ni anualmente”, desechando que sea inusual, como algunos economistas lo han descrito.

Cabe recordar que esta encuesta de empleo fue diseñada en 2009 y es la primera vez que se está usando en un escenario de desaceleración económica.

Dejar una respuesta