El presidente de RN, Mario Desbordes, es crítico con los errores que se cometieron durante la semana en el gobierno. Sin embargo, puntualiza que el balance, finalmente, es “bueno”, pues dice que la gente en la calle pasa por alto esos traspiés cuando ve el anuncio de los proyectos de migraciones y de gratuidad en educación técnico-profesional. El diputado subraya, eso sí, que es preciso evitar errores comunicacionales que empañen la gestión del Presidente Sebastián Piñera.
Se cumplen cuarenta días de gobierno. ¿Cómo ha visto la instalación de La Moneda?
Bien. Vi la instalación del gobierno anterior como subsecretario, pero también como dirigente de partido, una instalación más accidentada literalmente, por el terremoto, pero, al mismo tiempo, muchas autoridades nuevas no sabían qué hacer, conocían recién el aparato público. Esta vez eso ha cambiado. Fue un acierto haber vuelto a poner a personas que habían estado antes en el gobierno, como Andrés Chadwick, Cecilia Pérez, Rodrigo Ubilla y Cristián Larroulet. Todo ha permitido que haya un nivel de continuidad de lo que fue el primer y segundo gobierno de Sebastián Piñera.
Fue una semana negra para La Moneda por cinco errores: las frases polémicas de Gerardo Varela, las cifras erróneas sobre sida, los cambios en el directorio de TVN por no alcanzar paridad, el retiro del proyecto sobre derechos humanos y el nombramiento del hermano del Presidente en la embajada de Buenos Aires. ¿Cómo lo ve?
Los cinco episodios pueden ser abordados en positivo y en negativo. El tema de TVN tiene de positivo que los partidos no tuvimos ningún problema en priorizar calidad por sobre cuoteo. En el tema del sida, el gobierno corrigió rápidamente una cifra, y es un ministro que se puso a trabajar en un tema importante. Lo del ministro Varela ya dije que ojalá luego encuentre el tono que se necesita de un ministro de Estado. Sobre Buenos Aires, bueno, es la embajada más cercana donde probablemente tiene que estar la persona de mayor confianza del Presidente de la República, y escoge a su hermano. Me hubiese encantado que hubiese sido un dirigente de Chile Vamos, porque el hermano no es de nuestro sector, pero respaldamos la decisión del Presidente. Con todo eso, el balance de esta semana es bueno, porque la gente en la calle los pasa de largo cuando ven que por fin se tomó el toro por las astas en inmigración. Ese es un hito, porque hubo una decisión política del Presidente de ordenar. Lo segundo: gratuidad. Se nos puede criticar porque son 13 mil jóvenes solamente, pero no nos olvidemos que la Presidenta Bachelet los había dejado fuera. Me quedo con esas dos señales potentísimas y, claro, ojalá que no tengamos errores comunicacionales que empañen proyectos importantes.
¿Qué errores hubo del gobierno por el retiro del proyecto de reparación a las víctimas Valech?
Creo que se fue poco claro. El proyecto debió haber sido retirado en la sesión de la comisión antes de que se aprobara, sobre todo luego de que el ministro (Hernán Larraín) ya había dicho que iba a tener una respuesta dentro de semanas. Ahí estuvo el error. Este era uno de los cazabobos que nos dejó Michelle Bachelet, fue un proyecto que se ingresó a última hora sin financiamiento. Lo conversamos más de una vez cuando se analizó lo que se venía. Por lo tanto, lo que se debió haber hecho fue hablar con los parlamentarios de la Comisión de DD.HH. La oposición no habría tenido argumentos si es que se retira de forma transparente y argumentada en la comisión.
Pero tras el impasse en el Congreso se criticó más al ministro de la Segpres, Gonzalo Blumel, sobre todo desde el PS…
Alguien se equivocó en el gobierno en la forma en que se retiró el proyecto. No sé si fue Blumel, si fue Justicia, no tengo claro quién fue. La razón para retirar el proyecto está justificada y sabíamos que este tipo de proyectos eran trampitas que nos dejaron.
Respecto del nombramiento del hermano del Presidente en Buenos Aires, Piñera criticó en la campaña a Carolina Goic por sus familiares en el aparato público. ¿Eso es consecuente hoy?
El Presidente valora mucho la capacidad profesional de su hermano. Eso no está en duda. La vez pasada lo nombró en BancoEstado, donde tuvo un desempeño profesional bueno. En lo político tuvimos harta queja respecto de su desempeño, porque no hubo afinidad con los dirigentes de Chile Vamos. No vemos a Pablo Piñera como alguien cercano a nosotros, esta es una decisión del Presidente, confiando en las capacidades de su hermano, y es legítimo. Vamos a apoyar la decisión presidencial y ahora Pablo Piñera tendrá que demostrar que será un gran embajador en Buenos Aires.
¿Pero cuál es la señal política al nombrarlo en una de las embajadas más importantes?
La señal política que está dando Piñera al Presidente Macri es que está instalando en Buenos Aires a una persona de su máxima confianza, con la que el Presidente Macri, si necesita, va a poder comunicarse directamente, como si estuviera hablando con Sebastián Piñera. Espero que al embajador lo acompañe una persona que tenga alguna afinidad política con Chile Vamos.
La ministra de Cultura, Alejandra Pérez, dijo que, a lo mejor, esto no se había visto bien. ¿Qué opina?
Hay espacios a una interpretación crítica, no hay duda de eso. Yo prefiero quedarme con la facultad que tiene el Presidente.
Carolina Goic se bajó de la gira presidencial a la que había sido invitada luego de que se nombrara a Pablo Piñera en esa embajada…
La senadora Goic se baja también coincidiendo con que le piden el cargo al hermano esta semana, que era el director del Sence, Pedro Goic. Ahí se comete un error. Si yo invito a alguien a una gira y le pido el cargo al hermano a los días… Alguien no coordinó bien ahí, hubo una desprolijidad. Para dar tranquilidad a los ciudadanos que tienen derecho de cuestionar, digo que los parientes que ingresen a jefaturas de gestión pública lo hagan vía concurso público.
¿Es injusta la crítica de nepotismo de la oposición?
Cuando esas críticas se hacen de un lado o del otro me parecen súper interesadas, pequeñas y mezquinas. La regla general debiese ser siempre que los familiares de autoridades que ingresen al gobierno, salvo los cargos de los niveles superior, entren por Alta Dirección Pública. Tampoco podemos castrar a la familia de un político y obligarlo a recluirse como ermitaño.
Existe un proyecto de Evópoli para regular la presencia de familiares en el Estado, aunque con excepción de la del Presidente de la República. Dada la coyuntura y el revuelo del caso, ¿podría RN darle apoyo a la iniciativa?
El proyecto de Evópoli apunta en el sentido correcto. Aunque a algunos en el mundo político no les gusta, la ciudadanía nos lo está pidiendo. Este proyecto se debe impulsar siempre y cuando no estemos aludiendo a los cargos de exclusiva confianza del Presidente de la República, es decir, que tenga facultad para nombrar a sus ministros, subsecretarios, intendentes… Tiene que haber un mínimo de posibilidad de armar equipos.
¿Cómo vio el episodio generado por el diputado UDI Ignacio Urrutia en el Congreso?
Pienso que Ignacio Urrutia y Pamela Jiles quedaron como reyes con sus electorados extremos. Es un juego que le sirve solo al que quiere polarizar, solo al que quiere la confrontación. Son absolutamente contrarios a lo que yo espero en el debate parlamentario. Las declaraciones del diputado Urrutia es una falta de respeto a muchas personas que fueron torturadas. El que los catalogue de terroristas es inaceptable. La reacción de Pamela me parece desproporcionada, eso se responde con argumentos y no estoy de acuerdo con cómo reaccionó ella.
¿Se equiparan los dos episodios?
No, en absoluto. Creo que es más grave la declaración de Urrutia por lejos, por lejos… No son en nada equiparables.
Los jefes de bancada de Chile Vamos salieron a equiparar ambas acciones…
No escuché la opinión de los jefes de bancada, pero si fue así es preocupante. Yo creo que lo del diputado Urrutia es grave.
La subsecretaria de DD.HH., Lorena Recabarren, dijo que el Congreso y los partidos son los entes que deben condenar estas acciones. ¿Lo comparte?
La Comisión de Ética del Congreso es la que debería actuar. Ojalá podamos erradicar este tipo de cosas.
Si un diputado de RN hubiese hecho lo mismo, ¿lo pasarían al tribunal supremo del partido?
Para eso está la Comisión de Ética del Congreso. Esa es la instancia para ver ese tipo de hechos, creo que basta y sobra en relación con lo que sucedió.
¿Se podrían haber evitado estos episodios de la semana?
Algunos se podrían haber evitado, como el del ministro de Educación. De aquí en adelante, Varela no puede salirse del libreto como lo está haciendo. No es el primer error, pero espero sea el último. También espero que el ministro Varela se comprometa con el proyecto de gratuidad a concho. Estamos expectantes del proyecto que se va a enviar para financiar a los estudiantes que no van a tener gratuidad. Ese será otro gran hito que ojalá se produzca luego. Ahí vamos a ir olvidándonos de las malas frases.
Usted pidió más celeridad en la agenda del gobierno en el Congreso, dadas las críticas sobre la sequía legislativa. ¿Ha visto mejoras?
La semana pasada, el consejo de gabinete fue productivo. Hubo varios anuncios que me dejaron satisfecho. El Presidente está muy consciente de que hay que avanzar en materias legislativas. Espero que los distintos ministerios empiecen a producir los proyectos, que empiecen a concretar el programa de gobierno. Se le carga la mano a la crítica al ministro (Gonzalo) Blumel, pero no es a él a quien le toca acercar el programa en términos legislativos, esa es la labor de los ministros sectoriales. Esperamos que haya una buena cantidad de proyectos ingresando las próximas semanas.
La presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, dijo que esperaba que la Segpres pusiera en tabla los temas que habían hecho ganar a Piñera…
No es Blumel el que le va a hacer un proyecto de nuevo sistema de financiamiento de la educación -que espero que no se llame CAE- al Ministerio de Educación. Este tipo de proyectos deben salir de la cartera que corresponde, y luego ser monitoreados en conjunto con la Segpres.
¿Cómo ha sido la relación con los partidos de Chile Vamos en estos 40 días?
No es fácil en el momento de la instalación, porque estamos en la tensión de lo que pasa en cada una de las regiones. Pero ha sido una buena relación. Se ha visto bien al Presidente Piñera, acotado en los temas macro, ajustando la salidas públicas a los temas importantes.
Evópoli no está convencido con el proyecto que impulsaron sobre gratuidad en educación técnico-profesional, que fue petición del excandidato Manuel José Ossandón. ¿Cómo lo ve usted?
Hago un llamado a mis amigos de Evópoli a no casarse con frases de campaña. Confío en la cordura de Evópoli, de Felipe (Kast) que es su líder, de Francisco Undurraga que es su presidente. Yo entiendo que se critique si se aumenta la gratuidad en la educación universitaria, porque nos faltan recursos en otras áreas, pero se trata de la educación técnico-profesional; ahí están los jóvenes más vulnerables.
Se ha dicho que debe haber contención de las figuras presidenciales. ¿Educación puede abrir un espacio para que se enfrenten Ossandón y Kast?
No creo. Los presidenciables que se empiecen a perfilar más adelante, porque todavía no es el minuto, lo van a hacer con propuestas más que plantearse con diferencias con el gobierno. Sería un error que traten de diferenciarse distanciándose del gobierno.
Además de migración, ¿se instalará otra bandera de lucha propia en este gobierno?
Una en que siempre la derecha ha tenido una vocación especial: el tema de la seguridad. El gobierno está dando pasos fuertes hacia la real modernización de las policías, de ser capaces de enfrentar el combate contra el delito de una vez por todas de manera real. En materia de desarrollo social vamos a tener varias iniciativas desde los distintos ministerios sectoriales.(La Tercera)
