El dólar avanza en el mundo, depreciando toda moneda a su paso y el peso chileno no fue la excepción.
A esta hora la divisa estadounidense se instala en una punta vendedora de $ 591,90, lo que representa un avance de 80 centavos respecto al cierre del lunes.
«Hay dos factores principales: uno es el fortalecimiento del DXY que se mantiene sobre los 90 puntos, tras las palabras de Jerome Powell, que destacó las positivas cifras económicas de Estados Unidos y lo otro es la depreciación que viven los commodities, sobre todo el cobre que baja tras conocerse los datos PMI manufactureros de China cuyas cifras fueron más bajas de lo que se esperaba», explica la analista de EuroAmerica, Martina Ogaz.
El dollar index se acerca lentamente a los 91 puntos, creciendo 0,15% y anotando 90,49 unidades. Dicha cifra representa su mayor nivel desde el 19 de enero pasado.
El fortalecimiento de la moneda norteamericana es uno de los principales efectos que dejaron las palabras del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ante el congreso de ese país.
Si bien en un principio se percibía a Powell como «moderado», en su discurso dio más de un guiño favorable al alza de tasas e, incluso, no descartó la posibilidad de realizar una cuarta subida de tipos.
En tanto a esta hora los futuros del cobre en la Bolsa de Metales de Londres caen 1,25%, mientras que el valor del metal en el Comex y la Bolsa de Shangai también bajan 0,56% y 1,11%, respectivamente.
No obstante, no se prevén grandes alzas en el tipo de cambio para los próximos días.
«Nosotros creemos que existe un impulso depreciativo, no creemos que (el dólar) llegue a los $600, puesto que mañana se entregan los datos del PCE deflactor en Estados Unidos, que indica cómo están los precios y que la Fed sigue de cerca, y esto podría agregar volatilidad a los tipos de cambio», comenta la experta.
«El cruce local podría seguir buscando recuperar terreno en línea con el desempeño del dólar a nivel internacional, que pretende descontar la muy probable alza de tasas durante la reunión de marzo. Los riesgos de mayores caídas parecen esfumarse lentamente», estima Renato Campos, jefe de análisis XTB Latam.
EFECTO POWELL EN BOLSAS
Contra la corriente opera a esta hora Wall Street. Pese a que ayer las bolsas estadounidenses cerraron a la baja tras conocer el primer discurso del presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Jerome Powell, hoy se encuentran en terreno positivo.
En su primera declaración ante el congreso de Estados Unidos, Powell destacó la fortaleza de la economía y las señales de inflación, y se abrió a la posibilidad de un alza en la tasa de interés de referencia del banco central más acelerada de lo que se estimaba hasta ahora.
Las perspectivas de mayores retornos en los fondos federales aumentan el atractivo para los inversionistas en los mercados de renta fija y títulos del Tesoro, mientras que las apuestas en acciones se vuelven menos interesantes. Una subida más abrupta de las tasas también puede convertirse en un golpe para los activos de mercados emergentes.
Es así como el Dow Jones sube 0,48%, situándose sobre los 25.500 puntos, mientras el S&P 500 avanza 0,45% y el Nasdaq se alza 0,55%.
En tanto, en Latinoamérica, las principales plazas bursátiles cotizan mixtas, pero sin grandes variaciones. Mientras el S&P de Perú y el Merval argentino obtienen 0,07% y 0,22%, respectivamente, Brasil, México, Colombia y Chile se repliegan al principal mercado del mundo y operan a la baja.
EUROPA GIRA
Si bien Europa abrió a la baja, a minutos de finalizar sus transacciones, su desempeño ha dado un giro. Los principales índices bursátiles del viejo continente -a excepción del Ibex español-cotizan con modestas cifras verdes: el Dax alemán sube 0,03%, mientras que el Ftse 100 lo hace a un ritmo de 0,08%.
Algo más de ritmo experimentan las bolsas en Italia y Francia, con un Ftse Mib en 0,16% y el Cac con 0,15%.
CAÍDA DE ASIA
Las bolsas de Asia profundizaron sus caídas de ayer, resintiendo las palabras del nuevo presidente de la Reserva Federal.
Las bolsas en Asia cerraron hoy la jornada con caídas generalizadas. En Japón, el Nikkei concluyó sus operaciones con una baja de 321,62 puntos, equivalente a un retroceso de 1,44%, mientras que el Topix perdió 1,2%.
El Hang Seng de Hong Kong descendió 1,6% y el Kospi de Corea perdió 1,2%. El indicador regional MSCI Asia Pacific, por su parte, cayó 1,1%.
CAE MANUFACTURA CHINA
La actividad manufacturera y de servicios de China moderó su crecimiento en febrero debido a la interrupción de la actividad por las vacaciones del Año Nuevo Lunar y las medidas para combatir la contaminación, informó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
El índice de gerentes de compra (PMI) del país alcanzó los 50,3 puntos en febrero, frente a los 51,3 del mes anterior. Un valor por encima de los 50 puntos es sinónimo de expansión de la actividad, y por debajo de esa cifra apunta a una contracción.
La ONE señaló que se trata de una «fluctuación normal» durante el el Año Nuevo Chino, el principal periodo de vacaciones del país durante el que muchos comercios cierran y se paraliza considerablemente la actividad industrial, informó la agencia EFE.
La caída, sin embargo, encendió las luces de alerta sobre el desempeño de la segunda economía del mundo, ya que se trata del mayor retroceso en más de seis años.
También influyeron en esta desaceleración las estrictas medidas de las autoridades chinas para reducir la contaminación, entre ellas el cierre de fábricas, que han permitido que Beijing, una de las ciudades más contaminadas del mundo, tuviera en enero el primer mes invernal sin esmog desde 2013.
Pese a ello, la firma de análisis Capital Economics señaló que estos datos son más bajos de lo esperado y advierten del riesgo de que la segunda economía del mundo reduzca su crecimiento este año.
También el crecimiento del sector servicios de China se ralentizó en febrero, cuando llegó a los 54,4 puntos, por debajo de los 55,3 registrados en enero, según los datos oficiales divulgados este miércoles.
«Esto refleja un crecimiento más lento del sector servicios y una actividad del sector de la construcción más débil», apuntó el analista de Capital Economics Julian Evans-Pritchard. (DF)
