A sólo horas que se inicie la discusión de las indicaciones del proyecto más emblemático de la reforma educacional del gobierno de Bachelet -fin al lucro, copago y selección-, aún persisten dudas entre los parlamentarios de la Nueva Mayoría para aprobar la iniciativa que mañana se ve en las comisiones de Hacienda y Educación del Senado.
Uno de las figuras emblemáticas de la discusión en la Cámara fue Yasna Provoste (DC) -ex ministra- quien hoy, tras analizar con detención los cambios propuestos por el gobierno en el Senado, advierte sus profundos reparos.
-¿Cómo ve las indicaciones del Ejecutivo que fueron visadas con los senadores?
-No las veo bien, porque desaparecen por completo algunas aprobadas por la Cámara y no están alienadas con el corazón de la reforma.
-¿Por ejemplo?
-En la Cámara se prohibían absolutamente arriendos entre partes relacionadas y hoy se flexibiliza esa norma permitiéndolo para establecimientos pequeños y hasta con fines de lucro; en la Cámara aprobamos que las ATEs debían organizarse en entidades sin fines de lucro al igual que los sostenedores, pero aquí desaparece todo eso. Pero hay otra indicación tanto o más compleja que las anteriores.
-¿Cuál?
-Permitir a los megasostenedores, aquellos que tienen dos o tres colegios, puedan triangular los recursos de la subvención escolar. Eso es absolutamente criticable, porque hemos avanzado para lograr mayor control de las platas que el Estado entrega para los niños y esta medida permitirá a los sostenedores triangular las platas entre sus colegios.
Agrega que «no entiendo tampoco para que se haya bajado de 3° a 2° el grado de consanguinidad para permitir relaciones entre terceros».
Y señala que «es preocupante que en el proyecto original el sostenedor que vendía su colegio debía rebajar todos los aportes que había recibido del Estado por la Jornada Escolar Completa (JEC) y ahora sólo se le pide que descuente un porcentaje y no el total».
Su juicio es categórico: «Es un proyecto que hoy día se aleja bastante del corazón de lo que nosotros comprometimos: terminar con el lucro, copago y selección».
-¿Y qué es positivo de las indicaciones?
-Que se reincorporan las sanciones al lucro, que el proceso será gradual y que se crea un fondo de recuperación para el fortalecimiento de la educación pública con un monto anual de $250 mil millones, aunque esto no está en la Ley de Presupuesto, así dependerá de las voluntades.
-Si hoy tuviera que votar ¿aprueba o rechaza?
-Hoy es un proyecto que se ha alejado de la línea que comprometimos, no puedo aprobarlo así. Espero conocer las razones del Ejecutivo y siempre estoy abierta al diálogo, pero no entiendo por qué se flexibiliza tanto al punto de perder el sentido original.
LOS OTROS DIPUTADOS CON DUDAS
Las dudas también rondan a otros diputados oficialistas.
Fidel Espinoza, PS
«No me gustaron las indicaciones que pretenden dar gradualidad, corregir y crear subterfugios en materias de selección y lucro. Espero que mis compañeros de bancada mantengan la postura de no aceptar modificaciones sustanciales a la reforma», dice.
Gabriel Boric, IA
«Son un retroceso del espíritu inicial de la reforma. Se llama proyecto de fin al lucro, copago y selección, pero permite un 35% de selección en los colegios», explica.
Además, dice, «se instaura un nuevo crédito (para compra de colegios) que va ser un tremendo negocio para los privados y pésimo para el Estado, tal como ocurrió con los estudiantes universitarios, pero ahora es para los sostenedores. No estoy dispuesto a aprobar. Es impresionante el nivel de renuncia del gobierno».
Hugo Gutiérrez, PC
«Hay algo en que nadie ha puesto el foco y es esta idea de iniciar la reforma en algunas regiones antes que en otras. Aquí estamos hablando de un derecho fundamental como es la Educación. ¿Acaso algunos niños, por vivir en una región determinada, van a tener acceso a ese derecho antes que otros? De buenas a primeras, no me parece correcto», dice.
Mario Venegas, DC
«Se avanzaron en lagunas cosas, pero hay varias dudas todavía. Estoy revisándolas minuciosamente», dijo.
Alberto Robles, PRSD
«Lo que se está abriendo en términos de selección y lucro con las indicaciones del Senado a mí me parece inaceptable. Esta reforma, tal y como las estamos llevando, sigue el mismo parámetro de la ‘cocina’ de la reforma tributaria y no está bien». (La Segunda)