Estamos hablando del rasgo que introdujo la Reforma protestante en las sociedades occidentales, incluso la nuestra. Como efecto no deseado Lutero enseñó un mecanismo para entender la Sagrada Escritura; que se ocuparan otras partes comprensibles de la Biblia para entender lo oscuro de algunas textos; es decir, aprender a discernir, ocupando la inteligencia, pero racionalmente, pues las interpretaciones deben ser serias, Y así, sin querer queriendo, se pasó de la fe revelada en la Escritura a la razón para comprender dicha fe revelada. Entonces, los Padres de la Reforma iniciaron una rica reflexión teológica en donde los laicos participaron activamente, puesto que, al no haber sacerdotes, los pastores al inicio eran laicos con una actividad orientada religiosamente: pero la responsabilidad de la Salvación era individual.
Por eso es que el joven Kevin, el que amenaza con enviar al infierno a los asociados a Satanás, no parece ser cristiano. Se aparta de varias enseñanzas muy antiguas del cristianismo como son: el juicio sobre la Salvación ajena, no tener caridad, condenar sin dar razones, no enseñar, sino repetir prejuicios bastante básicos, (no se enseña con cadenas lógicas absurdas); tampoco se nota la inspiración reformada que reconoce la libertad individual y el derecho a discernir personalmente. Hay una debilidad teológica muy grande, muy maniquea, es decir pagana, al establecer dos principios absolutos, el bien y el mal.
Estas visones apocalípticas, llenas de cuentos irracionales y absurdas se parecen a algunas historias de youtube, donde se pueden encontrar insultos y falsedades sobre, prácticamente, todas las personas conocidas, muchas veces inventando conspiraciones ocultas para dar respaldo a la difamación calumniosa. Hoy no son sólo los nazis, los judíos, los comunistas o los jesuitas. Lo mismo, sucede con los comentarios a las noticias en medios electrónicos. Eso es lo que hizo Kevin, sacar a luz unas febriles ideas cloacales.
Pero como estamos en primavera, dirijamos nuestros pensamientos al primer pacto de Dios con los hombres, en la persona de Noé, Él quiso que el arcoíris, símbolo de la primavera cuando se retiran la nube y la humedad descompone la luz del sol, fuera también el símbolo de la amistad de Dios. Así que el arcoíris es bandera de alegría primavera y del cariño de Dios a quienes no se apartar de sus leyes.
La tradición protestante es muy rigurosa en materia moral, el temor a la condenación eterna cruza toda la obra de Lutero, de ahí que la búsqueda de certidumbre lo empuje a aceptar sólo la Escritura como fuente de Revelación; en Calvino también la certeza es muy importante, por eso que una personalidad rigurosa como la suya acepta la doctrina de la predestinación, es decir, las señales de nuestra Salvación en el mundo son muy escasas o nulas, pues nadie sabe si está salvado o condenado. Pero, cualquiera sea el caso, hay que comportarse escrupulosamente y apartarse de toda ocasión de pecado. En otras palabras, el apego a la Biblia y a la ética que de ella se deriva no se puede festinar de ningún modo; es la ética protestante que, para la sociología explica la aparición del capitalismo moderno, la democracia liberal, la empresa y la familia burguesa. En suma, la consolidación de una sociedad más vivible y humana. Así que el rol de la ética en la fe, siendo aquella una derivación lógica de esta, no se abarata mezclándola con juicios y opiniones de humanos, de suyo, pecadores, sobre todo si hablo como religioso. (Red NP)
Rodrigo Larraín, Académico Universidad Central de Chile



