Señal satelital en zonas sin acceso a la televisión abierta, clínicas móviles para dar cobertura a enfermos que se encuentran apartados incluso de las postas rurales y un retén de carretera que otorgue seguridad a la ruta birregional entre Carahue (La Araucanía) y Tirúa (Biobío) son parte del centenar de peticiones que vecinos de La Araucanía han propuesto incorporar al Plan Impulso.
Las iniciativas han sido recogidas entre enero y el viernes 5 de abril por el propio intendente de La Araucanía, Jorge Atton, en recorridos por 20 de las 32 comunas de la región. El propósito de las reuniones, en las que participan actores sociales, comunidades indígenas y autoridades locales, es socializar un conjunto de medidas gubernamentales para hacer efectivas al 2026 y recoger las urgencias locales para priorizar y definir proyectos.
Ambulancias permanentes, que no estén de paso en la ciudad y luego sean destinadas a otras zonas, pidieron los vecinos de Loncoche.
Con más de un mes de desfase, debido a la emergencia de los incendios forestales, que coparon su agenda entre febrero y marzo, la autoridad regional retomó las visitas. Su meta es llegar a las 12 comunas faltantes antes que concluya mayo.
Pero advierte que luego de completar la ronda, concretará nuevos encuentros para la implementación y seguimiento de los proyectos que se aprueben para cada lugar.
A las peticiones concretas, que dan cuenta de las aspiraciones de cada comunidad, se suman demandas transversales para aumentar el acceso al servicio de agua potable rural o mejorar caminos. Otras tantas se alojan en los tres ejes en que se divide el plan: agricultura, turismo y energías renovables no convencionales.
Reconoce como un problema extendido entre «las comunas más pequeñas» la carencia de profesionales que puedan desarrollar proyectos, pero anuncia convenios con las universidades de La Frontera, Católica de Temuco y Autónoma, las que darán apoyo técnico a los municipios para materializar sus ideas. (El Mercurio)
