Tailandia anunció este sábado que mantendrá sus operaciones militares contra Camboya, contradiciendo el anuncio de una tregua hecho horas antes por el presidente estadounidense, Donald Trump. El primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, aseguró en redes sociales que su país «seguirá llevando a cabo acciones militares hasta que consideremos que ya no hay peligro ni amenazas para nuestro territorio y nuestro pueblo».
El anuncio se produce mientras las autoridades tailandesas confirmaban «represalias» contra objetivos camboyanos en la mañana del sábado. Poco antes, el Ministerio de Defensa de Camboya había denunciado el uso de dos aviones de combate F-16 por parte del ejército tailandés, acusándolo de lanzar siete bombas en su territorio sin detener el bombardeo.
DESPLAZAMIENTO MASIVO
Los recientes enfrentamientos entre ambas naciones del sudeste asiático han causado ya una veintena de muertos y el desplazamiento de más de medio millón de personas. El conflicto tiene su origen en una antigua disputa sobre la demarcación de su frontera de 800 kilómetros, establecida durante la época colonial.
Las hostilidades entraron este sábado en su séptimo día. En un episodio anterior de violencia ocurrido en julio, se registraron 43 muertos y la evacuación de unas 300.000 personas.
ACUERDO DE PAZ
Horas antes de la escalada tailandesa, el presidente Trump había informado en su plataforma Truth Social que, tras conversar con los primeros ministros de ambos países, habían «acordado cesar todos los disparos a partir de esta noche y volver al acuerdo de paz original» alcanzado previamente bajo su mediación y la de Malasia. Trump afirmó que «ambos países están listos para la PAZ».
Sin embargo, tras la llamada, el primer ministro tailandés, Anutin, había señalado que «es el que ha violado el acuerdo quien debe resolver la situación, y no el que lo ha sufrido». Por su parte, el camboyano Hun Manet indicó que su país siempre ha abogado por medios pacíficos y sugirió a los mediadores internacionales usar sus capacidades de inteligencia para verificar qué parte comenzó los ataques el pasado 7 de diciembre.
Tailandia ya había suspendido un acuerdo de paz previo en octubre, luego de que varios de sus soldados resultaran heridos por minas terrestres en la frontera.(NP-Gemini-Emol-EFE)



