«¿Es verdad la renuncia?». Esta fue la pregunta que llegó a la Seremi de Salud de la Región Metropolitana desde el gobierno, tras leer que Paula Labra había presentado su dimisión, la cual ya había sido aceptada.
Tras ello, se activaron una serie de conversaciones que, de acuerdo a fuentes de Emol, derivaron en un llamado de la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, a la ingeniera comercial que había asumido al cargo hace recién cuatro meses. Allí, se logró desactivar la renuncia de la seremi que seguirá al mando.
«Tras trascendidos en diversos medios de comunicación, aclaramos que Paula Labra Besserer, seremi de Salud metropolitana, se mantiene en sus funciones como autoridad sanitaria de la región».
¿Qué pasó? De acuerdo a las mismas fuentes, la Subsecretaría de Salud Pública habría nombrado en un cargo que sería estratégico -y de confianza- de la seremi a una persona que debería trabajar codo a codo con la ingeniera comercial.
Tal decisión -aseguran quienes conocieron de cerca lo que sucedió en pocas horas- habría provocado la sorpresa e «incomodidad» de Paula Labra, quien ayer y anteayer no tuvo actividades públicas.
Conocido este «malestar», habría sido la propia subsecretaria Paula Daza quien se contactó con la seremi para conversar acerca de la situación que provocó su dimisión, la cual incluso ya había sido aceptada.
Aquí -según ha podido averiguar este medio- hay otro actor: el gobierno tuvo que intervenir. Como sea, la renuncia de Paula Labra a la seremi de Salud metropolitana logró ser revertida. Fue la trastienda de una dimisión que duró unas pocas horas.



