Como gobernador de Santiago y como presidente de los Municipios Rurales, queremos advertir una situación crítica para las 18 comunas rurales de la región. La nueva Ley 21.692 restringe el antiguo Fondo de Apoyo Regional —que históricamente representó un 32% de la inversión regional— exclusivamente al transporte, eliminando la posibilidad de financiar “otros proyectos de interés regional”, como siempre permitió el ex-FAR. Esto deja fuera una cartera de más de $70.690 millones en iniciativas que hoy no pueden ser reconocidas por el fondo.
Por eso es indispensable aprobar la glosa presentada por los diputados Raúl Leiva, Alberto Undurraga y el presidente del Senado, Manuel José Ossandón, que permite un FAR amplio y flexible para la RM. Las comunas rurales no solo requieren movilidad: necesitan iluminación, seguridad, veredas, agua potable rural, centros de salud, equipamientos comunitarios, cámaras, y proyectos de cohesión social. Que el ministro de Transportes quiera limitar la inversión solo al transporte desconoce la realidad de miles de familias y contradice los principios de equidad territorial.
Si el Ejecutivo y el Parlamento no aprueban esta glosa, las comunas rurales se quedarán sin posibilidad alguna de recibir inversión del Gobierno Regional en seguridad, salud, espacio público y desarrollo local. No hablamos de preferencias, sino de justicia territorial. Hoy, la decisión está en manos de ellos: aprobar esta glosa es garantizar que el mundo rural no siga pagando el costo de una ley que, tal como está, los excluye de la inversión pública más básica. (El Mercurio Cartas)
Claudio Orrego
Gobernador Regional Metropolitano de Santiago
Rodrigo Contreras
Alcalde de Paine, presidente de la Asociación de Municipios Rurales (AMUR)



