Este 20 de septiembre el presidente Gabriel Boric debutó en la tradicional Asamblea General de Organización de Naciones Unidas (ONU) con un discurso centrado marcadamente en la situación política que atraviesa Chile. Su objetivo era hacer ver a las demás naciones, especialmente aquellas en vías de desarrollo, que si no toman medidas para evitar el aumento de la desigualdad o la injusticia en sus países, podrían sufrir consecuencias similares al estallido social chileno de octubre de 2019.
En un discurso de nueve carillas, el mandatario optó por darle especial preponderancia a la situación interna, lo que fue valorado en el oficialismo, pero duramente criticado desde oposición. Una de sus principales objeciones tiene que ver con que el mandatario se haya dado el tiempo para abordar el tema del estallido social, dejando absolutamente de lado la situación de violencia en La Araucanía.
En este sentido el diputado de la UDI Sergio Bobadilla lamentó que el jefe de Estado haya dado tanto tiempo de su primera intervención ante la asamblea al estallido social ocurrido en Chile y, en cambio, no haya hecho lo propio respecto “a los graves hechos que ocurren en la provincia de Arauco y La Araucanía, donde los narcoterroristas han asesinado, quemado y desplazado personas de este territorio contra su voluntad”, señaló.
“LA ROPA SUCIA SE LAVA EN CASA”
Su compañero de bancada Renzo Trisotti manifestó que le hubiera gustado que las palabras del Presidente ante la ONU hubieran sido “de unión, de futuro y no de división o de una determinada posición”, como a su juicio lo habría hecho el jefe de Estado; mientras que al también diputado gremialista Juan Manuel Fuenzalida, el discurso lo dejó con “un sabor amargo, sobre todo porque en el extranjero trata de mostrar una realidad que en Chile no ocurrió», indicó aludiendo al estallido social.
Al diputado Álvaro Carter le irritó que el jefe de Estado haya hablado en la ONU sobre acontecimientos internacionales de violencia, “pero no dice ninguna palabra respecto a la violencia que se vive en la zona Macrosur de nuestro país”.
La diputada RN Sofía Cid comenzó su crítica recordándole al mandatario que “la ropa sucia se lava en casa”. Acto seguido hace hincapié que en la asamblea anual de la ONU se debió centrar “en darle certezas y seguridad al mundo de que Chile es un país donde se respeta el Estado de derecho, que es lo que ha estado en duda”, dijo, y añadió que el presidente Boric debió aprovechar esta instancia internacional para garantizar que los extranjeros puedan “venir con tranquilidad e invertir en Chile, que nuestro país seguirá siendo un socio confiable, un Estado seguro y que puede mantener alianzas como lo ha hecho hasta ahora”.
El senador del Partido Republicano Rojo Edwards acusó al presidente Boric de usar este foro, “para seguir culpando a Carabineros de la violencia ocurrida desde el 18 de octubre de 2019, acusándolos implícitamente de graves violaciones a los derechos humanos” y, adicionalmente dice, no acepta su “contundente” derrota en el plebiscito. (DF)
