El ministro de Educación, Nicolás Cataldo (PC), realizó un balance del seminario sobre el proyecto del nuevo sistema de financiamiento de la educación superior (FES) desarrollado en el Congreso, señalando que el proyecto es «perfectible» y que el Ejecutivo está dispuesto a realizar ajustes en su formulación. Cataldo indicó que, pese a la «percepción bien hegemónica» de solo críticas al FES, la discusión con expertos e instituciones mostró opiniones más favorables a ciertos aspectos del proyecto.
En conversación con Radio Duna, el titular del Mineduc destacó que existen consensos ineludibles, siendo el más unánime que «el CAE no da para más». El ministro enfatizó la necesidad de avanzar en la idea de legislar el FES, pero comprometiendo los ajustes necesarios en la tramitación. Aseguró que el Ejecutivo está dispuesto a flexibilizar en temas clave como el copago, el tope de la contribución de los estudiantes una vez egresados y, de manera «crítica», resguardar la autonomía de la educación superior.
Cataldo reconoció que la iniciativa debe regirse por un principio de progresividad y responsabilidad fiscal, si bien lamentó el «muy poco espacio para que aumentemos significativamente los recursos en educación», un sector que observa un retroceso porcentual en inversión, especialmente en educación parvularia. El ministro mencionó que este año, por primera vez en 20 años, se debieron incorporar más de $100 mil millones en la Ley de Presupuestos para la «recarga del CAE», lo que afecta la posibilidad de cumplir con otras prioridades educativas. Con todo, el secretario de Estado admitió que «no hay sentido de realidad detrás de la idea de que el FES no sufra cambios» y expresó su «esperanza» de que el proyecto se apruebe antes del fin del actual Gobierno.
Respecto a la postura de la academia, Cataldo calificó de «interesante» una columna de los rectores Carlos Peña (UDP) y Juan Carlos de la Llera (UC). Los rectores cuestionan que el FES no aborde el financiamiento integral de la universidad, sino solo el estudiantil, señalando que la investigación actualmente se subsidia con la matrícula. Además, advierten sobre la vulneración de la autonomía académica y el riesgo de que las instituciones dependan de los «vaivenes fiscales» y del «ciclo político», tal como ha ocurrido en la educación superior latinoamericana financiada por el Estado. Cataldo se mostró abierto a estas preocupaciones, precisando que están disponibles a «dejarlo escrito en la ley» para defender seriamente la autonomía de las instituciones. (NP-Gemini-Emol-Duna)



