El gobierno de Venezuela ordenó este miércoles la expulsión del embajador alemán por su respaldo al líder opositor Juan Guaidó, bajo una fuerte presión internacional encabezada por Estados Unidos que anunció más sanciones para asfixiar al presidente Nicolás Maduro.
El gobierno de Donald Trump revocó 77 visas de venezolanos allegados a Maduro y advirtió “a las instituciones financieras extranjeras que enfrentarán sanciones” si facilitan “transacciones ilegítimas que beneficien” al gobierno venezolano.
“Estados Unidos va a revocar 77 visas, incluidas las de muchos funcionarios del régimen de Maduro y sus familias. Continuaremos haciendo rendir cuentas al régimen de Maduro hasta que la libertad se restablezca en Venezuela”, dijo el miércoles el vicepresidente estadounidense, Mike Pence.
Intentado contrarrestar la arremetida internacional, el gobierno de Venezuela declaró al embajador Daniel Kriener persona “non grata” y le ordenó abandonar el país en 48 horas debido a sus “recurrentes actos de injerencia en los asuntos internos”.
“Esta es una decisión incomprensible que agrava la situación y no contribuye a la distensión. Nuestro apoyo, el apoyo de Europa, para Juan Guaidó permanece intacto”, aseguró el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas.
Kriener estuvo en el grupo de diplomáticos que recibieron el pasado lunes en el aeropuerto internacional a Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países, cuando regresaba de una gira por Sudamérica tras haber burlado una prohibición de salida del país.
«ÚNICOS NON GRATOS SON USTEDES»
Al conocer la decisión, mientras presidía un debate en el Congreso de mayoría opositora, Guaidó aseguró que la expulsión de Kriener debe “ser tomada como una amenaza por el mundo libre”.
“El único non grato en Venezuela, en la región, en el mundo (…) señores usurpadores los únicos non gratos son ustedes en este país. Están amenazando a quien ayuda al país”, aseguró el también jefe parlamentario, de 35 años.
Hasta ahora la decisión sólo afecta al embajador alemán, pese a que también estuvieron en el aeropuerto los representantes de Francia, Canadá, Holanda, Portugal, Rumanía, España, Argentina, Brasil, Chile, Perú, Ecuador y Estados Unidos.
Parte de la comunidad internacional temía que Guaidó fuera arrestado al llegar a Venezuela, de donde salió furtivamente el 22 de febrero para presionar infructuosamente por el ingreso desde Colombia de alimentos y medicinas donados por Estados Unidos.
“Ya el régimen no tiene capacidad de respuesta distinta a la represiva. Ese es su gran drama. Depende sólo del garrote y la inacción. No hay respuesta proactiva. Solo reactiva y represiva”, declaró a la AFP el politólogo Luis Salamanca. (La Nación AFP)