Las 5 lecturas de Boric sobre el triunfo del Rechazo

Las 5 lecturas de Boric sobre el triunfo del Rechazo

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El Presidente Gabriel Boric se ha referido varias veces al resultado del 4 de septiembre, manifestando distintas interpretaciones sobre lo ocurrido en ese plebiscito. La más reciente fue en la entrevista que hizo con CNN este lunes, cuando aseveró que «no puedes ir más rápido que tu gente», lo que derivó en duras críticas en las últimas horas.

En la misma entrevista con CNN aseguró que «he dicho esto antes, pero pretender estar adelantado a tu época es una forma elegante de estar equivocado» y que «tenemos que ir un poco más lento, necesitamos resolver nuestras diferencias con más democracia, no con menos».

Asimismo, interpretó el desenlace de los comicios del 4 de septiembre como una necesidad de cambios profundos pero sin desechar lo avanzado en las últimas décadas.

«El veredicto de la gente en Chile, en mi opinión, fue ‘queremos cambios, cambios profundos, pero queremos mantener lo que hemos ganados en las últimas décadas», dijo.

Pero también en las últimas semanas ha señalado que los resultados del Plebiscito son una lección de «humildad», de querer cambios pero con «gradualidad» y que no hay que «despreciar la decisión» del pueblo.

LA NOCHE DEL 4S: «CHILE HA DEMOSTRADO SER EXIGENTE»

La misma noche del Plebiscito, Boric remarcó que el pueblo de Chile había hablado «de manera fuerte y clara» y que había entregado dos mensajes. «El primero es que quiere y valora a su democracia, que confía en ella para superar las diferencias y avanzar. Y eso lo confirma este proceso electoral que ha tenido la mayor convocatoria de ciudadanos y ciudadanas en las urnas en toda nuestra historia», aseguró.

«El segundo mensaje del pueblo chileno es que no quedó satisfecho con la propuesta de Constitución que la Convención le presentó a Chile, y por ende ha decidido rechazarla de manera clara en las urnas. Esta decisión de los chilenos y chilenas exige a nuestras instituciones y actores políticos que trabajemos con más empeño, con más diálogo, con más respeto y cariño, hasta arribar a una propuesta que nos interprete a todos, que dé confianza, que nos una como país«.

El recado, según Boric, fue contundente sobre que «ahora sí nos pongamos de acuerdo». «Hoy, Chile ha demostrado ser exigente y confiar en la democracia», dijo.

DISCURSO DEL 11S: «CONFÍO EN LA SABIDURÍA DEL PUEBLO»

En el marco del discurso por la conmemoración de los 49 años del golpe de Estado, el Mandatario hizo varias lecturas sobre la contingencia y la continuación del proceso constituyente.

Primero se dirigió a quienes «parecieran deslizar que quieren recular respecto a los compromisos adquiridos» y dijo que «los resultados del Plebiscito del pasado domingo no son apropiables por nadie en particular. Y no cometan el error de creer que el que se haya rechazado el texto propuesto por la Convención significa un rechazo a los cambios y transformaciones en Chile. Eso no es así». «No cambiar no es una opción», aseveró.

Pero también fue duro contra las críticas que se estaban haciendo por esos días contra quienes votaron Rechazo y declaró que «yo confío firmemente en la sabiduría del pueblo y eso significa no despreciar, no ningunear las decisiones que toma el pueblo, porque diferencia de hace 49 años la derrota que sufrimos en las urnas quienes estábamos por la opción que fue derrotada, el Apruebo, fue una derrota democrática».

Según Boric, la derrota fue un llamado del pueblo de Chile a «avanzar con mucha decisión, con gradualidad, pero sin renunciar». «Los chilenos y chilenas han exigido una nueva oportunidad para arribar a un texto que refleje los anhelos de justicia y dignidad que han sido expresados colectivamente tantas veces a lo largo de nuestra historia», señaló.

MIRADA EN EL DISCURSO ANTE ONU

Durante su visita a Nueva York, en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, el Presidente se desmarcó de la tesis que plantea que la derrota del Apruebo en el Plebiscito fue también una derrota del Gobierno.

«Algunos han querido ver el resultado del plebiscito como una derrota del Gobierno. Y con toda humildad quiero hoy día decirles a estas Naciones Unidas que nunca un gobierno puede sentirse derrotado cuando el pueblo se pronuncia. En democracia, la palabra popular es soberana y es la guía para todo momento», aseguró.

De acuerdo con Boric, el pueblo se expresó «dándonos una lección de democracia que tomamos. Chile le ha exigido a su democracia y a sus actores políticos estar a la altura de sus demandas y el desafío de hoy que tenemos nosotros es estar, también, a la altura de ellas».

En el mismo discurso aseguró que quienes se dedican a política «muchas veces confundimos con facilidad los éxitos que podemos tener como voceros de la molestia ciudadana con nuestra real capacidad de ser constructores de mejores futuros».

Y en ese marco, que el resultado del plebiscito «nos ha enseñado a ser más humildes, la democracia debe ser humilde, y a asumir que la construcción del Chile que soñamos no está en las recetas de ningún sector en particular, sino en la síntesis que podamos hacer combinando lo mejor que cada uno puede aportar».

LA LECTURA DE LOS «BORDES»

Otro punto que se desprende de las palabras del Mandatario es que el resultado del 4 de septiembre obliga a otra fórmula para un proceso constituyente, más acotado.

«Lo que espero que pase es que tengamos una nueva Convención con bordes más claros, que eso lo tienen que definir en la conversación que se está teniendo en el Congreso, con plazos quizás más acotados tomando en cuenta la experiencia anterior y con apoyo de comités de expertos o de gente que contribuya a hacer la discusión más fácil y digerible para todos», dijo en el World Leaders Forum de la Universidad de Columbia.

Para Boric, la lección es que en este nuevo proceso se debería lograr «una Constitución que, desde mi punto de vista, sea más general. Creo que la Constitución no tiene que abordar cada una de las demandas identitarias que existen en la sociedad. Tiene que ser un marco común que permita a la política hacerse las preguntas que todavía no nos hemos hecho». (Emol)