A medida que se acerca la primera vuelta presidencial del 16 de noviembre, el equipo de campaña de José Antonio Kast —candidato del Partido Republicano— prepara ajustes estratégicos clave. La inscripción oficial de su candidatura ante el Servicio Electoral (Servel), prevista para antes del 18 de agosto, marcará el fin de la precampaña y el inicio de una etapa más intensa.
Hasta ahora, el balance interno es favorable. En el partido aseguran que Kast atraviesa “su mejor momento”, con buenos resultados en encuestas y una imagen fortalecida. Sin embargo, el nuevo ciclo exigirá mayor despliegue territorial, profundización del programa y una presencia más activa del candidato en medios y actividades públicas.
Aunque los detalles del rediseño aún se mantienen en reserva, se anticipa que Kast asumirá un rol más político. Durante la precampaña, ha evitado controversias, delegando las confrontaciones a figuras como Arturo Squella, Ruth Hurtado y dirigentes del Partido Social Cristiano. Ellos han liderado las disputas con Chile Vamos, permitiendo que Kast se concentre en sus propuestas sobre seguridad, migración y economía.
Su participación en debates recientes —como Enatrans 2025, donde se enfrentó a Evelyn Matthei y Johannes Kaiser— ha reforzado su perfil. En esos espacios, Kast ha insistido en mirar hacia el futuro, evitando temas valóricos o controversias del pasado. “Hoy día tenemos un problema de narcotráfico, de crimen organizado, de inmigración ilegal”, afirmó en uno de los encuentros.
El tono del candidato también ha comenzado a endurecerse. Esta semana, acusó a la abanderada oficialista Jeannette Jara de mentir sobre la nacionalización del cobre, señalando que dicha propuesta sí figuraba en su programa de primarias. El episodio evidenció que, al convertirse en favorito, Kast ha empezado a recibir más cuestionamientos de sus rivales.
En el Partido Republicano reconocen que el crecimiento en las encuestas se dio antes de lo previsto. La estrategia inicial apuntaba a un repunte en septiembre y octubre, como ocurrió en 2021. Ahora, el desafío es sostener el liderazgo por tres meses, en un escenario de alta exposición y competencia.
A pesar de los riesgos, el equipo valora el método de campaña: ordenado, sin improvisaciones y centrado en propuestas concretas. Kast ha logrado instalar sus temas en la agenda sin entrar en polémicas, lo que —según sus cercanos— lo mantiene como el candidato mejor posicionado de la derecha rumbo a La Moneda. (Red NP)
