“Empleados ¿públicos?” se llama la columna que escribió el abogado Axel Kaiser, donde sugiere “dejar de utilizar el eufemismo ‘empleados públicos’ para referirse a los empleados estatales”.

Kaiser plantea en este escrito a las cartas al director de El Mercurio que “es hora de que superemos la ficción según la cual el Estado es un ente abstracto encargado de servir el bien común y veamos la realidad como es.
El escándalo de las remuneraciones en el Estado, las que superan con creces a las del sector privado, es la mejor prueba de que el Estado lo integran esencialmente grupos de interés que buscan maximizar sus beneficios.
Quienes las reciben pueden intentar justificarlas de mil formas, pero lo cierto es que la mayoría de ellos, si tuviera que enfrentarse a la realidad del mercado; es decir, a ser pagados de acuerdo con su productividad real, jamás obtendría los salarios que obtienen con cargo a todos los chilenos. Lo mismo vale para todos los amigotes y parientes de políticos beneficiados con contratos y asesorías truchas”. (El Mercurio-El Dínamo)

