Ayer lunes el Ministerio Público formalizó a Alfredo José Henríquez Pineda, conocido como el «Gordo Ale», quien es investigado entre varias cosas por el secuestro y homicidio del exteniente venezolano, Ronald Ojeda, ocurrido en febrero de 2024.
También se le acusa de una serie de ilícitos relacionados con el narcotráfico y el comercio sexual.
Testigos de la causa explicaron el rol que tenía Henríquez Pineda en la organización. «Tiene un rol relevante, está en los niveles superiores de la estructura criminal», dio el fiscal Héctor Barros.
La investigación permitió determinar que el «Gordo Ale» ingresó al departamento de Ojeda vestido con uniforme de la PDI, con un rol preponderante en el secuestro. Se detalló que Henríquez estaba en la jerarquía de «Los Piratas».
Un testigo protegido explicó que las órdenes, como en toda asociación ilícita, venían de arriba y que no hubo pagos a todos los que participaron en el delito, debido a que el trabajo se hizo «mal».
El testigo dijo que el encargo lo habría recibido primero el «Niño Guerrero», luego Carlos Gómez (Boby) y Adrián Gómez (Turko). Boby era el líder de la banda, pero fue detenido, siendo ascendido Henríquez.
El testigo afirmó que la orden principal llegó del Ministerio del Interior en Venezuela, siendo Diosdado Cabello el apuntado. Lea más en El Mercurio. (Emol)
