El excandidato presidencial del Partido de la Gente (PDG), Franco Parisi, afirmó este jueves que su colectividad ha superado el trato despectivo de la política tradicional y ahora posee una influencia determinante. En una entrevista radial, Parisi sostuvo que, aunque antes estaban «acostumbrados al ninguneo de lado y lado», el PDG demostró que «va a pisar fuerte y está mucho más ordenado», lo que les permite ahora «cargar la balanza».
Parisi fue consultado sobre los recientes cuestionamientos de Darío Quiroga, encargado estratégico de la candidata Jannette Jara, quien se refirió a él y al PDG con epítetos como «viejitos chuñuscos» y «flaiterío». El economista recordó un «encontrón» previo con Quiroga, pero valoró que este haya «reconocido y pedido públicas disculpas», actuando «como correspondía».
Respecto a la intención de la campaña de Jara de captar al electorado del PDG, Parisi minimizó los dichos pasados, señalando que «eso es problema de ellos» y que era la forma en que «todos» los miraban. Sin embargo, enfatizó que los votos de su electorado no son suyos, sino de la gente, rechazando la actitud de quienes «salían corriendo en la noche a abrazar al candidato ganador».
Parisi confirmó que, aunque los candidatos presidenciales José Antonio Kast o Jara no asistan a su programa de YouTube Bad Boys, el PDG igual realizará una consulta interna a su militancia para definir su posición en la segunda vuelta. El excandidato reiteró su desazón con las opciones, indicando que no le gusta «ninguno» de los dos, a quienes considera «igualmente no buenos para Chile» por los estilos y trayectorias que proyectan.
En cuanto a la conducta interna, Parisi mencionó que corrigieron al diputado electo del PDG, Javier Olivares, quien había manifestado su apoyo a Kast. Le recordaron que su posición ahora debe estar alineada con el partido, asegurando que estarán «mucho más encima de los diputados».
Finalmente, el excandidato adelantó que el PDG se encuentra en «negociaciones fuertemente» con tres diputados electos. Estos legisladores provendrían de partidos de oposición y oficialismo que no lograron superar el umbral del 5% y que, por lo tanto, enfrentarían su disolución. (NP-Gemini-Emol)



