El fiscal nacional, Ángel Valencia, reaccionó a la denuncia que realizó la contralora Dorothy Pérez sobre los retrasos en el proceso de destrucción de droga incautada en el país, que en algunos casos supera un año. Valencia sostuvo que los hallazgos de la Contraloría “derivan en oficios que son remitidos al Ministerio Público para investigar y esclarecer los hechos”.
El jefe del ente persecutor precisó que una eventual indagación administrativa podría establecer diferencias entre el pesaje inicial y el posterior de las sustancias decomisadas. “Lo que nos corresponde como Ministerio Público es determinar las causas de esas diferencias”, comentó, agregando que tales variaciones pueden deberse a delitos, pérdida de humedad, extravío o incluso sustitución de drogas.
Valencia valoró el trabajo conjunto con la Contraloría, pues a su juicio “representa un aporte relevante para una persecución más eficaz de los delitos de droga”. Enfatizó además que el objetivo común es evitar que las sustancias incautadas vuelvan al mercado ilícito “por la vía del robo o manipulación indebida”. (NP-Perplexity-Emol)
