El Imacec de marzo exhibe un sorprendente aumento de 6,4%, en donde el incremento de los servicios, +5,1%, es un ejemplo del dinamismo con el cual esa actividad sectorial se recupera al reducirse las restricciones al movimiento. Hay que recordar que las cuarentenas volvieron a las comunas más pobladas en los últimos días hábiles de marzo, por lo cual el resultado de esa restricción se notará en los indicadores de abril.
Si tomamos como base el tercer trimestre del 2019, antes de la violencia subversiva de octubre de ese año y de la pandemia, podemos observar en el siguiente cuadro la evolución del daño sectorial, que llegó a su mayor impacto en el segundo trimestre del año pasado, a partir del cual comienza lentamente la recuperación.
Fuente: Elaborado por el autor en base a Imacec desestacionalizado Banco Central.
Tal como se puede observar en el cuadro, la minería salió indemne durante este periodo y si bien la producción física es casi la misma que en el trimestre base, no sufrió una caída como en el resto de los sectores. Fue prudente no cerrar la minería como lo hizo Perú, con un gran daño sobre el PIB y con una ganancia sanitaria mínima. Diferente es el caso de la industria manufacturera, donde el índice de producción cayó a 88 en el segundo trimestre del año pasado, lo que implica una caída de 12%, con una paulatina recuperación que la lleva a 101 en el último periodo medido, lo que implica un leve incremento con respecto al punto de partida.
El caso del comercio ha sido de alta variabilidad, ya que cayó bruscamente hasta un índice de 81, con una contracción de 19%, en donde ciertos subsectores han sufrido impactos aún mayores. Sin embargo, los retiros de los fondos previsionales y los bonos fiscales elevaron las ventas de bienes durables, provocando incluso quiebres de stock, con lo cual, en la actualidad, el índice de producción se encuentra en 108, es decir un 8% mayor que en el punto de partida. Sin duda, el comercio más pequeño exhibe daño mayor y además tuvieron que lidiar con el control soviético de las listas de bienes esenciales, pero la apertura que se está produciendo ahora gracias a la vacunación acelerada, permitirá que nuevo oxigeno llegue a ese sector que es el principal empleador de Chile.
Los servicios, por último, aunque están llegando a un nivel similar al del punto de partida, han arrastrado el daño por varios trimestres y solo en la última medición, gracias a los permisos de vacaciones, pudieron generar algo de ingresos. Es interesante la estrategia griega de vacunar masivamente sus principales lugares turísticos, lo cual para nuestro país, implicaría que lugares como Rapa Nui, donde más del 70% del PIB es turismo, podría ayudar a un renacimiento temprano, al estar toda su población vacunada en pocos días y poder recibir turistas en igual condición.
Se acerca el renacimiento de la economía chilena y con ello de los empleos, gracias a la vacunación masiva. Por favor no ahoguemos a una economía que renace con nuevos impuestos que, de transitorios, no tendrán nada. (El Líbero)
Tomás Flores
