El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, ha generado fuertes reacciones al calificar de «inverosímil» la postura del ministro de Educación, Nicolás Cataldo, respecto a los graves hechos de violencia que persisten en el Instituto Nacional. Cataldo había argumentado que su cartera carece de «competencias legales» para intervenir directamente en la situación.
A través de su cuenta en la red social X, el jefe comunal manifestó su incredulidad ante la insistencia del secretario de Estado en deslindar responsabilidades, especialmente ante ataques tan serios como los dirigidos a profesoras del recinto. Desbordes recordó que, en el pasado reciente, el ministro sostuvo reuniones con grupos que, según él, han justificado o defendido este tipo de actos violentos.
El alcalde enfatizó la necesidad de coherencia en el discurso de las autoridades, señalando que «no se puede condenar por un lado y relativizar por el otro». Asimismo, extendió sus críticas a otras instituciones relevantes en el ámbito educativo y social.
Desbordes acusó directamente al Defensor de la Niñez de intentar coartar su capacidad de acción, específicamente al buscar impedir la aplicación de la ley conocida como Aula Segura. De igual manera, cuestionó la tibieza de las declaraciones emitidas por el Colegio de Profesores.
El jefe comunal hizo un llamado a estas organizaciones para que demuestren un apoyo genuino a docentes y estudiantes, instándolas a sumarse activamente a las acciones legales que la municipalidad impulsará para enfrentar la violencia.
El alcalde criticó la búsqueda de excusas mientras la situación de las profesoras se torna crítica. Relató un testimonio de alto impacto: «’Me rociaron con acelerante y me golpearon con una cadena… pensé que había perdido la visión’».
Finalmente, Desbordes concluyó que, frente a este nivel de violencia, se actuará con «toda la fuerza de la ley» en defensa de las víctimas, sus colegas y de aquellos estudiantes que sí buscan desarrollar sus estudios en un ambiente seguro. (NP-Gemini-Emol)



