Con recuerdo a los trabajadores fallecidos durante la masacre de Marusia en 1925, además de críticas directas a los principales candidatos presidenciales de la oposición y emplazamientos a los del oficialismo, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), David Acuña, en un discurso que se extendió por más de 30 minutos, se refirió este Día del Trabajador a las principales demandas del gremio.
En un estrado ubicado cerca de la sede central de la Universidad de Chile, en la Alameda, el líder gremial comenzó resaltando los más de 800.000 afiliados a la organización y los más de 254.000 que podrán participar en las elecciones internas.
«Porque en la CUT no sólo luchamos por la democracia social, la practicamos día a día con participación activa, voto universal y elecciones transparentes», destacó.
Precisamente tras recordar la masacre ocurrida en Tarapacá hace 100 años, donde cientos de trabajadores fueron asesinados por acción gubernamental para terminar la paralización, y que derivó meses después en otra matanza en La Coruña, Acuña criticó directamente los dichos de la candidata presidencial de Chile Vamos, Evelyn Matthei, sobre las muertes en dictadura.
“Señora Matthei, se lo digo, lo decimos con rabia, eran totalmente evitables. No vamos a olvidar a nuestros mártires que dieron su vida para defender nuestros derechos”, criticó.Avances en materia laboral, salario mínimo y demandas del gremio
En su alocución también se refirió a los avances que se han desarrollado durante los últimos años en materia laboral, particularmente la aprobación de la Ley Karin y la implementación paulatina de las 40 horas.
Sobre esta última, también criticó al gobierno por no existir aún su implementación en funcionarios públicos. “Las 40 horas también tienen que ser un derecho para las y los trabajadores del Estado. Y no, compañero, no vamos a permitir fraccionar los contratos por hora, porque eso es precarización, ese es el discurso de la derecha, compañero, no lo vamos a permitir”, detalló.
Respecto a la agenda actual del gremio, explicó: “Nuestra agenda futura es clara: salario vital, negociación ramal, pensiones dignas y sala cuna con perspectiva educativa. Estas no son demandas aisladas, son parte de una visión del país que queremos construir colectivamente. Un país justo, solidario, con derechos garantizados y con un Estado que esté al servicio de la gente y no del gran empresariado”.
También resaltó el acuerdo alcanzado durante la jornada de ayer con el gobierno de establecer el salario mínimo en 529.000 desde mayo y 539.000 en enero próximo.
“Esto no ha sido fácil, lo hemos construido con una política salarial empujada por el diálogo y la movilización. Sabemos y estamos conscientes que no es suficiente, pero sin duda hay que decirlo, hemos avanzado”, señaló Acuña. Sin embargo, también emplazó al gobierno a alcanzar “en el menor plazo posible” un salario que supere la línea de la pobreza.
Luego, enfatizó en la importancia de la llamada negociación ramal.
“La negociación ramal se nos arrebató y hoy queremos recuperar este derecho, esta lucha histórica. La negociación ramal no es sólo un acto reivindicatorio sino que es un bien superior que fortalece el diálogo social, busca crear garantías mínimas que respondan a las nuevas relaciones laborales y a las necesidades de cada sector, fortaleciendo la negociación colectiva”, explicó Acuña.
DARDOS A OPOSITORES Y EMPLAZAMIENTO A OFICIALISTAS
En su discurso también tuvo críticas concretas no solo hacia la candidata de Chile Vamos, sino que también a los candidatos del Partido Republicano, José Antonio Kast, y del Partido Nacional Libertario, Johannes Kaiser.
“El candidato libertario y el republicano no creen en los derechos de las mujeres, no creen en una jornada laboral digna, no creen en un salario digno, no creen en que los trabajadores y trabajadoras tengamos voz y tengamos condiciones laborales decentes”, comenzó señalando.
A lo que agregó: “Esa es la propuesta del candidato republicano y libertario, retroceder y estancarnos, y yo les pregunto, ¿ese es el Chile que queremos? Lo único que esperamos es violencia y represión de un gobierno de derecha, de todas las derechas, porque eso es parte de su ideología, es parte de sus principios y parte de su programa de gobierno».
Enfatizando que “la derecha en el poder es incapaz de enfrentar las desigualdades y la injusticia”, emplazó a los candidatos del progresismo a “que incluyan el trabajo decente, la negociación ramal y el salario vital en sus programas de gobierno”.
“Que escuchen la voz de las y los trabajadores organizados, porque tenemos mucho que aportar desde la realidad y las necesidades que exige la ciudadanía. No da lo mismo quien gobierne, no da lo mismo quienes eligen nuestras leyes, no da lo mismo quien guie nuestros destinos”, explicó.
PRESENCIA DE CANDIDATOS
Los candidatos presidenciales que competirán en las primarias oficialistas asistieron a la marcha del primero de mayo en el marco del Día del Trabajador, siendo la primera actividad tras la inscripción de este miércoles. Mientras Carolina Tohá (PPD), Jeannette Jara (PC) y Gonzalo Winter (FA) participaron de las manifestaciones en Santiago, Jaime Mulet (FRVS) lo hizo en Copiapó.
Tohá marchó acompañada de representantes del Partido Socialista, colectividad que le entregó su apoyo el día previo a la inscripción de las primarias ante el Servicio Electoral, tras la decisión de Paulina Vodanovic (PS) de retirar su candidatura.
De hecho, este jueves, Tohá marchó junto a Vodanovic, en una señal de unidad del bloque. Asimismo, se sumaron otros militantes socialistas para manifestar su respaldo, además de representantes del PPD.
En esta ocasión, la abanderada presidencial del Socialismo Democrático abordó el debate sobre el salario mínimo: «El sueldo mínimo en la actual administración se ha demostrado que con diálogo, que con voluntad se puede mejorar la condición de los trabajadores que menos remuneración tienen en Chile».
«El debate que va a venir ahora es sobre el salario vital, que en el fondo es poner y llevar las remuneraciones y también combinadas con los subsidios a un nivel que asegure la vida de las personas, de las familias, para que nadie que trabaja en Chile esté en riesgo de caer en la pobreza, algo que hoy día no está totalmente garantizado y es el próximo paso que tenemos que dar», señaló.
Por su parte, Jara (PC) marchó acompañada de militantes del Partido Comunista, entre ellos los parlamentarios Boris Barrera, Daniela Serrano, Alejandra Placencia y Daniel Núñez, además de miembros de la directiva del partido y figuras como Irací Hassler (exalcaldesa de Santiago) y Marcos Barraza.
Previo a sumarse a la marcha, Jara había planteado su postura respecto al salario mínimo: «Compartimos la necesidad de evolucionar del concepto del salario mínimo a pagar hacia un salario para vivir». «Esta es una discusión que en Chile se tiene que transparentar, porque por más que la familia se ponga a disposición, trabaje jornada completa y le ponga todo el esfuerzo, si ese salario no le alcanza para vivir, un salario vital, difícilmente nuestra sociedad va a poder fortalecer su cohesión social», sostuvo la exministra del Trabajo.
Agregó que «aquí hay muchas personas que sacándose la mugre, la pega, no logran llegar con tranquilidad a fin de mes. Así que apoyamos avanzar hacia un salario vital y vamos a proponer que en mi gobierno, si las chilenas y los chilenos me eligen su presidenta, vamos a tener un salario que va a alcanzar los $750.000, que es el equivalente a una familia de cuatro personas hoy día».
Además, la candidata volvió a recurrir al baile —una actividad que, como ha señalado en otras ocasiones, le gusta— y esta vez lo hizo junto al presidente de la CUT, David Acuña.
A su vez, Winter participó de la marcha junto a representantes del Frente Amplio, entre ellos la presidenta del conglomerado, Constanza Martínez, y los diputados Andrés Giordano y Lorena Fries.
En relación con el debate sobre el salario mínimo, Winter destacó el acuerdo entre el Gobierno y la Central Unitaria de Trabajadores y aseguró que, de ganar las elecciones, es algo que continuará. «Este gobierno ha sido el que más ha subido el sueldo mínimo en los últimos 30 años y en términos reales. Pero lo segundo más importante es que siempre lo he hecho con acuerdo de la CUT. Y algo que yo puedo decir que voy a mantener durante mi gobierno es que, evidentemente uno hubiese deseado más, pero que en mi Gobierno las alternativas al sueldo mínimo siempre se harán en diálogo con la CUT, porque somos un gobierno que entiende a los trabajadores no solamente como fuerza productiva, sino también como un actor político y de hecho el actor político fundamental del país, porque es el actor político que hace andar al país», manifestó el abanderado del FA. (La Tercera-Emol)