En su carta del jueves 25, el diputado Giorgio Jackson propone que por sobre un cierto umbral de precio del cobre toda la renta “extraordinaria” sea de beneficio fiscal. Dado que ya tenemos una ley que establece mayores impuestos a medida que aumenta el precio del cobre, la propuesta del diputado va más allá de ello, esto es, eliminar la “fuga de rentas” provocada por el alto precio.
Sería interesante que el diputado Jackson profundice su propuesta. En primer lugar, si la propuesta implica cobrar el exceso de renta, ¿debiéramos considerar también devolverles dinero a las empresas mineras cuando el precio del cobre cae inesperadamente por debajo de cierto umbral? Y, en ese caso, ¿quién y cómo se define lo que es alto y bajo?
En segundo lugar, ya logramos empeorar nuestra posición en el ranking de atractividad minera, cayendo del 6° lugar en el 2018 al 30° en el 2020, quedando incluso por debajo de Argentina. Dado que Chile no es el único país con Cobre, y que los inversionistas obviamente prefieren invertir en lugares más atractivos, ¿no cree el diputado que propuestas como la suya espantarían a los inversionistas, no solo en la minería y no solo a los extranjeros? ¿Precisamente cuando necesitamos inversiones para seguir creciendo?
En tercer lugar, sería interesante que aclare si esa propuesta solo es el comienzo de otras, como por ejemplo evitar la “fuga de rentas” en industrias tales como la celulosa, la fruta, los salmones, la construcción, choripanes y completos, cada vez que algún funcionario de turno determine que se está generando una fuga de rentas debido a un alto precio que, dicho sea de paso, vaya uno a saber cómo se determina.
Parto del supuesto de que la propuesta del diputado está basada en su buena intención de preparar de la mejor manera posible a nuestro país, y sus habitantes, para los años venideros. Pero, lamentablemente, el camino al infierno está empedrado de buenas intenciones. Por lo demás, propuestas de ese tipo ya fueron implementadas en los años sesenta con nefastos resultados para los ciudadanos, pero excelentes para los políticos, funcionarios de turno y empresas de lobby que terminan influyendo en lo que significa precio “alto”.
Gabriel Berczely
Presidente de Horizontal
