El gremio de locatarios nocturnos de Valparaíso expresó una serie de inconvenientes que tiene para mantener su actividad, apuntando a los niveles de inseguridad en la vía pública en varios sectores de la comuna y la falta de respuestas de las autoridades.
Por esa senda, aseguran que aquello se ha traducido en el cierre de varios locales, el último de los cuales fue «El Irlandés» de la zona de Bellavista, que tras 21 años ya anunció que bajará las cortinas producto, en parte, de esta situación.
De acuerdo con El Mercurio de Valparaíso, el presidente de la Asociación de Locatarios Nocturnos de Valparaíso (Alnoval), Víctor Ramírez, comentó que «su partida apaga una luz más de los tantos locales de la bohemia porteña que se han ido cerrando a lo largo de estos años. Y la verdad que es una pena porque es un local muy entretenido, muy bonito, un local familiar, que el dueño con su esposa sacaron adelante con mucho esfuerzo».
POLÍTICA MUNICIPAL
Al respecto, el líder gremial advirtió que esta situación del sector viene de años y que si no hay cambios va a seguir propagándose. «La verdad es que creo que mientras no haya una política municipal, primero que todo, que realmente tome la bohemia nocturna como un ingreso económico importante dentro de la ciudad, sencillamente van a seguir cerrando negocios», expresó.
En el caso específico del sector de Bellavista, indicó que los principales problemas están a la salida de los locales, por lo cual se hace necesario contar con una presencia policial continúa.
«Allí hay muchos negocios como, precisamente, ‘El Irlandés’. La gente llega a los locales, lo pasa bien, pero el problema es la salida, que es una cuna de ladrones. Los carros que están ahí, lo único que hacen es proteger a veces a los mismos ladrones. (…) Allí tiene que haber un punto fijo de Carabineros o de seguridad municipal», indicó Ramírez.
En esa línea, precisó que como gremio han buscado conversar con la autoridad comunal, sin resultados hasta ahora. «Hemos tratado de acercarnos a la alcaldesa para plantearle un montón de situaciones que pasan en la noche y no hemos tenido respuesta. Estamos completamente abandonados en ese aspecto», remarcó el líder gremial, enfatizando que no se puede dejar de lado a un sector gravitante en la historia de la ciudad.
Agregó que en un momento el dinamismo económico que generaba el sector estaba al nivel de los más relevantes como el portuario. «Habían tantos locales, tantas luces, el empleo que se generaba era mucho. Imagínate que ahora cuántos locales quedan, la verdad que muy pocos», subrayó.
Remarcó que sectores como la subida Ecuador o Cumming tienen serias dificultades producto de la delincuencia, por lo que se requiere una planificación. «Con un buen plan, con una buena administración, podríamos perfectamente ordenar esto. Y que también la alcaldesa se preocupe de ir a fiscalizar locales que son clandestinos, que hay muchos que se usan solamente para venta de droga y crear incivilidades en Valparaíso», indicó.
«NECESITAMOS ACCIÓN CONCRETA»
El presidente de la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso (CRCP), Javier Torrejón, indicó que tanto los recientes rayados al edificio del otrora Bar Inglés y el anunciado cierre de «El Irlandés» dan cuenta de la realidad que vive la capital regional.
«Condenamos enérgicamente el acto vandálico que afectó al recién restaurado edificio del ex Bar Inglés y lamentamos el cierre definitivo del bar El Irlandés, un espacio emblemático que, como tantos otros, ha sido empujado a desaparecer, siendo una consecuencia directa del abandono sostenido de Valparaíso, ciudad que parece condenada a sobrevivir entre ruinas, rayados, delincuencia y promesas incumplidas».
Agregó que «necesitamos acción concreta, coordinación real y voluntad política».(Emol)