Durante la tarde de este miércoles, se confirmó la salida del ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, luego de que el presidente Gabriel Boric le solicitara la renuncia. La decisión se vincula directamente con el quiebre entre el Gobierno y la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), partido al que pertenece Valenzuela, tras la negativa de esa colectividad a integrar la lista parlamentaria oficialista.
Según información recabada por Meganoticias, el FRVS optó por conformar una lista electoral junto al Partido Acción Humanista (AH), desoyendo los reiterados llamados a la unidad formulados por el mandatario. Valenzuela era el único ministro militante del FRVS, partido liderado por Flavia Torrealba, quien impulsó la precandidatura presidencial de su esposo, el diputado Jaime Mulet, en las primarias de izquierda que finalmente ganó Jeannette Jara (PC).
Ante la salida de Valenzuela, el subsecretario de Agricultura, Alan Espinoza Ortiz, asumirá de forma subrogante la conducción de la cartera. Espinoza es abogado con 17 años de trayectoria en el Ministerio de Agricultura, donde ha ocupado cargos de alta responsabilidad. Según el sitio oficial del ministerio, se destaca por su liderazgo estratégico, capacidad de gestión y compromiso con el desarrollo rural sostenible.
RENUNCIA SUBSECRETARIA IGNACIA FERNANDEZ
El lunes, el presidente Boric también aceptó la renuncia de la subsecretaria de Agricultura, Ignacia Fernández Gatica, quien se incorporará al comando presidencial de Carolina Tohá, candidata del Socialismo Democrático. La propia exministra del Interior confirmó la noticia en redes sociales, agradeciendo el gesto: “Gracias por poner tu experiencia y entusiasmo al servicio de un proyecto que quiere convocar una mayoría para ganar y transformar”, escribió en su cuenta de X.
Fernández asumirá como encargada de contenidos de política pública en el equipo de Tohá. El presidente Boric valoró su trabajo y compromiso, y nombró en su reemplazo a Alan Espinoza Ortiz, quien ya había sido designado como ministro subrogante.
PERFIL DE ALAN ESPINOZA
• Abogado de la Universidad Bolivariana, con especialización en políticas públicas, dirección y gestión pública.
• Entre 2010 y 2014 fue jefe de Recursos Humanos y encargado de capacitación en ODEPA.
• Posteriormente, se desempeñó como asesor de gabinete en el Ministerio de Agricultura.
• Entre 2022 y 2023 fue seremi de Agricultura en la Región de Aysén.
• Hasta ahora, ejercía como jefe de gabinete en la Subsecretaría de Agricultura.
Con estos movimientos, el Ministerio de Agricultura enfrenta una completa reconfiguración en su liderazgo, en medio de tensiones políticas que han impactado la estructura del oficialismo de cara a las elecciones parlamentarias.
MULET: «UNA TORPEZA»
Desde el Congreso Nacional, el diputado Jaime Mulet (FRVS) criticó este miércoles la eventual salida del ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, en medio de tensiones entre La Moneda y los partidos oficialistas por la definición de listas separadas para las elecciones parlamentarias de noviembre.
Valenzuela, uno de los pocos ministros que se mantenía desde el primer gabinete del presidente Gabriel Boric, habría sido removido tras la decisión de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS) y Acción Humanista (AH) de presentar candidaturas por separado, lo que contraviene el mandato presidencial de enfrentar los comicios en un solo pacto. El propio Boric realizó gestiones para evitar la división, sin éxito.
Mulet, quien busca la reelección por Atacama, afirmó no tener confirmación oficial sobre la salida del ministro, pero advirtió que sería “una torpeza” desvincular a quien ha tenido una gestión destacada en agricultura familiar campesina y exportación. Además, alertó que la medida podría perjudicar la candidatura presidencial de Jeannette Jara.
El diputado defendió la autonomía de los partidos en la definición de listas, señalando que “no le corresponde al gobierno meterse” en decisiones internas. Recalcó la lealtad del FRVS con el Ejecutivo y rechazó cualquier intento de condicionar la participación democrática: “Las dos listas son una facultad absolutamente legítima de los partidos políticos. La ciudadanía decidirá”.
Mulet también mencionó que entre los más de 190 candidatos presentados por FRVS y AH figura el independiente Miguel Ángel Calisto, quien hasta hace poco buscaba un cupo en Demócratas. El episodio refleja el creciente distanciamiento entre La Moneda y sus aliados, en un momento clave para la articulación electoral del oficialismo.
JARA: «EL PRESIDENTE TENDRÁ SUS RAZONES»
La candidata de Unidad por Chile, Jeannette Jara, abordó la decisión del Presidente Gabriel Boric, quien le pidió la renuncia del ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela (FRVS), la tarde de este miércoles.
“Es una decisión del Presidente de la República”, respondió al ser consultada por la situación, que en primer término se produjo debido al quiebre que tuvo que la Federación Regionalista Verde Social (FRVS) en las negociaciones parlamentarias del oficialismo para tener una lista única.
“Todos pueden tener una opinión, pero nadie se puede meter a una decisión privativa de los presidentes de la República. Y sus razones tendrá a la vista”, argumentó la abanderada del oficialismo.
MEMORIA POLÍTICA: EL GOLPE DE LAGOS
La decisión presidencial, poco habitual por su carga política explícita, evocó el episodio ocurrido en octubre de 2002, cuando el entonces presidente Ricardo Lagos removió a tres operadores vinculados al liderazgo de Guido Girardi en el PPD. En ese momento, Gonzalo Navarrete fue cesado como subsecretario de Salud tras denuncias ante la Contraloría, mientras José Concha y Daniel Farcas salieron del Sesma y Sence, respectivamente. Farcas, considerado cercano a Girardi, fue señalado como recaudador de campaña, aunque sus vínculos fueron desmentidos por el entorno del parlamentario.
La acción de Boric busca marcar un punto de inflexión en la disciplina interna del oficialismo, en un contexto donde la unidad electoral es clave para enfrentar los comicios. La salida de los representantes del FRVS del gabinete se interpreta como una señal directa a los partidos que opten por caminos propios, pese a los esfuerzos del Ejecutivo por mantener un bloque cohesionado.
En 2002, Girardi respaldó públicamente las decisiones de Lagos, afirmando que su sector buscaba “el mejor gobierno posible” y que respetaban las atribuciones presidenciales para realizar ajustes. El gesto de Boric, dos décadas después, se inscribe en una lógica similar: reafirmar el liderazgo presidencial frente a fracturas internas que amenazan la estrategia electoral del oficialismo. (Red NP-Meganoticias-Copilot La Tercera)