En horas de la mañana de este jueves, el Presidente Gabriel Boric encabezó el inicio de la primera reunión de ministros y altas autoridades de Seguridad Pública y Crimen Organizado del Consenso de Brasilia.
La actividad, que se desarrolla en el Ministerio de Relaciones Exteriores, tiene como objetivo avanzar en el intercambio de información y la cooperación en materia de crimen organizado entre todos los países de América del Sur.
Se trata de una instancia que permitirá a Chile liderar el diálogo y los esfuerzos de la región en la materia, orientados al intercambio de conocimiento especializado para combatir a organizaciones criminales que amenazan al continente.
En su intervención ante las autoridades invitadas, el Jefe de Estado señaló: “Tenemos un desafío que es común y que es la principal demanda de nuestras sociedades (…) es que la seguridad es una condición base para el ejercicio de la mayoría de las libertades y derechos. Y por eso, independiente del color político de nuestros gobiernos, es importante que la tomemos profundamente en serio, y nos hagamos cargo con eficacia de esta demanda de nuestros pueblos”.
En ese sentido, apuntó que “el crimen organizado y el narcotráfico representan un problema de seguridad para las personas, pero también, para las instituciones. Son organizaciones que buscan de manera activa corromper nuestra institucionalidad, copar, además, los espacios públicos, arrebatándoselos a los ciudadanos y estableciendo poderes territoriales que desafían la presencia del Estado”.
“Frente a esto, no podemos dar ni un paso atrás. No podemos ceder ni un centímetro en esta batalla. A la delincuencia, al crimen organizado y al narcotráfico les vamos a ganar. Pero les vamos a ganar juntos”, recalcó.
Boric dijo que dichas amenazas son particularmente graves para las democracias de la región. “Si nuestras democracias no se muestran robustas, decididas, con iniciativa, se abre paso a soluciones autoritarias y populistas que terminan restringiendo libertades y, por lo general, terminan aumentando la violencia”.
De acuerdo al Mandatario, se trata de un desafío policial, pero también político y cultural. “Un elemento central de estas organizaciones criminales al día de hoy es su carácter transnacional, por lo que sólo se puede enfrentar con éxito si es que países y Estados actúan de manera coordinada, traspasando los límites de las fronteras nacionales”.
“Por eso he querido abrir este encuentro haciendo un enérgico llamado a la unidad de nuestros países, a la unidad de Sudamérica y a la unidad de América Latina para poder hacer frente común en el combate contra el crimen organizado y el narcotráfico. No nos podemos dejar impresionar, y no podemos abandonar por el actuar de las bandas criminales”, enfatizó.
Y luego profundizó: “Ante su organización y su despliegue transnacional les convoco a que opongamos la solidez de nuestras democracias, la coordinación de nuestros Estados y lo mejor de nuestras capacidades policiales. Para ello es clave y uno de los objetivos de esta reunión que avancemos en mecanismos de enlace permanente que permitan intercambiar información, coordinación y dar una respuesta contundente que esté a la altura de este desafío, lo que va a ser parte del debate que den en los próximos horas”.
Asimismo, lanzó una crítica a aquellas voces que llaman a romper relaciones diplomáticas con países vecinos: “Esta reunión es un ejemplo de la diplomacia, de las virtudes del multilateralismo y del diálogo. Cuando hay voces en nuestros países que pretenden encerrarse en sí mismas y llaman a no relacionarse con otros Estados, nosotros decimos que la única manera de enfrentar los desafíos comunes que tenemos en América del Sur es justamente colaborando con relaciones diplomáticas, con trabajo conjunto, con intercambio de nuestras autoridades, con trabajo conjunto de nuestras policías”. (La Tercera)