En dependencias del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), en la calle Beauchef de Santiago, la ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, encabezó la mañana de este viernes una nueva reunión del Comité de Gestión de Riesgo de Desastres (Cogrid) nacional.
En la instancia participó la delegada presidencial para la reconstrucción, Paulina Saball, y otros ministros como Giorgio Jackson, de Desarrollo Social, el titular de Educación, Marco Antonio Ávila, y su par de Salud, Ximena Aguilera.
Tras la reunión, la ministra Tohá realizó una vocería para entregar detalles de las consecuencias de los incendios forestales por los que fue declarado el estado de excepción de catástrofe en las regiones de Ñuble, Biobío y Araucanía.
La ministra informó que se contabilizan a la fecha 554 incendios atendidos, con un daño correspondiente a 436 mil hectáreas. El 56% de la superficie afectada corresponde a plantaciones forestales, el 12% a bosque nativo y el 17% a terrenos agrícolas.
La emergencia partió en Ñuble el jueves 2 de febrero, en el marco de una alarma meteorológica por un “evento extremo de altas temperaturas”. A las horas, la zona centro y sur del país estaba en llamas.
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De acuerdo al reporte de las autoridades, siguen en combate un total de 58 siniestros.
En Maule, el incendio que concentra atención y está generando una sensación de alarma, es el de Río Blanco. No es un incendio que tenga posibilidad de alcanzar zonas pobladas, afecta un sector de bosque nativo y se desarrolla desde los últimos días de enero. “Se han hecho una serie de apoyos extra para atenderlo en la medida que también otros incendios que afectaban a personas lo han permitido. Cuando teníamos incendios que estaban en el entorno de áreas habitadas, los recursos se concentraban ahí, en la medida que ello no suceda en la región, se puede atender de mejor manera este incendio”, expuso la titular de Interior.
El fuego está afectando una zona de bosque nativo que la región valora especialmente.
En la Región de Ñuble, los incendios de Quillón, de Coelemu y de Quirihue son los que generan mayor atención, están mucho más contenidos que en el periodo previo, pero el temor que hay es que mayores temperaturas en los próximos días pudieran reactivarlo. Por ahora, el mayor esfuerzo está en mantenerlo controlados. Han aparecido varios focos nuevos en la región, pero en general los han logrado controlar de buena manera, reportó la ministra Carolina Tohá.
Se está evaluando extender el toque de queda a la comuna de Coihueco.
La Dirección Meteorológica de Chile emitió avisos de eventos de altas temperaturas para este viernes y sábado en las regiones de Maule, Ñuble y Biobío y para el lunes 20 de febrero en las regiones de Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins y Maule.
“No tenemos en el horizonte temperaturas extremas previstas, pero sí temperaturas que van a seguir siendo motivo de preocupación”, acotó la ministra Tohá.
La autoridad señaló que tras la atención de la emergencia urgente, se irá cambiando el foco de la preocupación a las tareas de reconstrucción de las zonas arrasadas por el fuego.
Tohá señaló que los datos recopilados apuntan a que hubo intencionalidad en uno de cada cuatro incendios forestales. (La Tercera)
