Un nuevo y ácido enfrentamiento se ha desatado entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, con el Presidente Gabriel Boric y la Cámara de Diputados como protagonistas de una disputa centrada en el ausentismo parlamentario y la lentitud en la tramitación de leyes de alcance social. La controversia surge a raíz de las duras críticas emitidas por el Mandatario hacia los diputados, las que han sido respondidas con igual o mayor vehemencia desde el hemiciclo.
Durante la inauguración de una sala cuna en San Felipe, el Presidente Boric cuestionó frontalmente el fracaso de una sesión de la Cámara baja la semana pasada debido a la falta de quorum. En un tono de emplazamiento, el Jefe de Estado llamó a los legisladores a priorizar proyectos de beneficio social como las leyes de Sala Cuna Universal y la que busca terminar con el Crédito con Aval del Estado (CAE). Boric sentenció que «obras son amores» y que sería mucho más productivo dedicar el tiempo legislativo a sacar adelante estas iniciativas, en lugar de que las sesiones fracasen porque «los diputados no llegan a trabajar».
RÉPLICA DE LA CÁMARA: EPISODIO DE 2021
La respuesta del timonel de la Cámara de Diputados, José Miguel Castro (RN), fue inmediata y se centró en desmentir la inacción y recordar el pasado del propio Mandatario. Castro aseguró que el proyecto que pone fin al CAE ya fue despachado al Senado, y el de sala cuna universal se encuentra en la Cámara Alta. Además, el presidente de la corporación revivió un episodio de 2021 en el que una sesión también fracasó por ausencia, mencionando directamente que ni el entonces diputado Boric ni la actual ministra vocera, Camila Vallejo, estaban presentes. Finalmente, Castro instó al Presidente a dedicarse a enviar rápidamente un proyecto para adelantar el pago de las cuentas de la luz, responsabilizando al gobierno por la «ineficiencia» en esta materia.
AEDO PIDE RESPETO A LAS INSTITUCIONES
Las críticas del Presidente resonaron en las distintas bancadas, generando una reacción transversal. El vicepresidente de la Cámara, Eric Aedo (DC), si bien reconoció el derecho del Mandatario a opinar, le recordó que como Jefe de Estado debe enmarcar sus declaraciones en el respeto a las instituciones y poderes del Estado. Aedo defendió el trabajo del Parlamento, destacando la aprobación de leyes como la de robo de madera y la renovación del Estado de Excepción en la Macrozona Sur. En tanto, jefes de bancada como Frank Sauerbaum (RN) y Felipe Donoso (UDI) acusaron a Boric de seguir comportándose como «dirigente universitario» y le reprocharon su propia «asistencia paupérrima» cuando fue diputado. Incluso, el diputado oficialista Jaime Araya (ind. PPD) calificó la generalización del Presidente como un «tacle maletero», recordando también su ausentismo pasado y el estado real de tramitación de los proyectos de ley mencionados.
Este nuevo conflicto se produce en un momento de alta tensión entre ambos poderes, con la discusión de la Ley de Presupuestos como telón de fondo. Las críticas de la oposición por un supuesto mal cálculo y la molestia generalizada, que incluye al oficialismo, por el aumento en los fondos destinados a las pensiones de los expresidentes (monto proporcional a lo que recibirá Boric) han exacerbado los ánimos. A esto se suma la crisis por el cobro excesivo en las cuentas de la luz debido a un error metodológico, que incluso había generado la amenaza de una acusación constitucional contra el exministro de Energía, Diego Pardow, flanco revivido por nuevas advertencias que habría recibido el exsecretario de Estado. (NP-Gemini-La Tercera)



