Una mujer de 46 años, residente de El Tabo, logró escapar de su domicilio tras ser víctima de una brutal agresión y cautiverio de dos días a manos de su pareja, un hombre de 32 años. La víctima, que huyó para solicitar socorro, ingresó a un centro asistencial con lesiones graves que incluyen una puñalada, fractura de cráneo y piezas dentarias sueltas.
Según la denuncia, la violenta situación se desató el viernes pasado en su domicilio en El Tabo, luego de una discusión. Al llegar sola a la vivienda, la mujer fue atacada sorpresivamente por su conviviente, quien la tomó del pelo, la golpeó y pateó. La agresión escaló cuando el sujeto tomó un cuchillo de la cocina y la apuñaló en el pie derecho.
La víctima declaró que, tras el ataque, el hombre la trasladó a la parte posterior de la casa, donde le mostró un pozo y la amenazó de muerte en reiteradas ocasiones. El agresor la golpeó nuevamente en la cara y cabeza, provocándole grandes hematomas. Luego, decidió encerrarla en un dormitorio por dos días, manteniéndola sin agua ni comida.
La mujer pudo escapar el domingo pasado, aprovechando que el imputado dormía profundamente. Saltó una reja y fue socorrida por un repartidor de gas, quien la trasladó a una unidad de Carabineros. En el consultorio de El Tabo, un informe médico preliminar detectó «ojos con hematomas de signo mapache», sangrado en el oído y piezas dentarias inferiores sueltas.
Debido a la gravedad de su estado, la mujer fue derivada al hospital Claudio Vicuña, donde sufrió convulsiones. Un escáner posterior en el hospital Carlos van Buren de Valparaíso confirmó una fractura de base en el cráneo y hemorragia interna cerebral, entre otras heridas.
La Brigada de Homicidios (BH) de la PDI detuvo al agresor, identificado con iniciales C.F., luego de que el Juzgado de Garantía de San Antonio emitiera una orden de aprehensión. El fiscal Rolando Martínez formalizó al imputado por los delitos de lesiones graves en contexto de violencia intrafamiliar (VIF) y amenazas de muerte en contexto de VIF.
La Fiscalía solicitó la prisión preventiva del sujeto argumentando que las lesiones son graves y la pauta de riesgo de la víctima arrojó un «riesgo vital alto». Sin embargo, el tribunal rechazó la prisión preventiva, ordenando que el imputado quedara con las medidas cautelares de arresto domiciliario nocturno y prohibición absoluta de acercarse a la víctima. Al cierre de esta edición, la afectada permanecía internada en Valparaíso. (NP-Gemini-Emol)
