-A sólo dos días de que se hiciera pública la última entrega de la encuesta Cadem- T13, que aclara en parte las actuales posiciones de la desatada carrera presidencial, el gerente de asuntos públicos de la encuestadora, Roberto Izikson, analiza el escenario político. Si bien recalca que el estudio que encabeza es una encuesta de opinión y no un sondeo electoral, sí da algunas claves de un proceso que aún está lejos de tener certezas.
¿Es normal a estas alturas que ya esté desatada la carrera presidencial?
-Es normal que ocurra en los gobiernos de cuatro años, lo que se amplifica por la elección municipal. Incluso, se atrasó un poco.
Pero hoy, ¿son Piñera y Lagos los mejores posicionados?
-Para medir las elecciones presidenciales hay una fórmula mágica, eso es la correlación que existe entre conocimiento y aprobación. Ese cuadro está reservado para José Miguel Insulza, Isabel Allende, Ricardo Lagos Escobar en la Nueva Mayoría y para Sebastián Piñera en la centro derecha.
Hay otros posibles candidatos con buena evaluación como Alejandro Guillier y Manuel José Ossandón…
-El desafío que tienen ellos es darse a conocer para estar en el otro cuadrante. Vamos a verlos muy activos, especialmente a Ossandón a quien lo separa más de 30 puntos de conocimiento de Piñera.
¿Esa es la gran diferencia?
-El nivel de conocimiento tiene un impacto súper significativo, sobre todo en esta etapa, porque da algo fundamental, el “top of mind”, el primer nombre que se viene a la cabeza cuando se pregunta por quién votarías si las elecciones fueran el próximo domingo. Con todo, este es el semestre decisivo en la carrera presidencial.
¿Por qué?
-Porque quien está ganando en las encuestas en la respuesta espontánea ha terminado siendo el Presidente desde Frei en adelante.
Entonces, ¿la indefinición de Lagos puede ser muy perjudicial para la NM?
-Le abre un escenario más complejo a la NM en el bloque no se la pueden jugar al todo por Lagos y el ex Presidente no va a tomar su definición, al menos, hasta después de la municipal. Santiago se va a transformar en una elección súper importante para él, porque va Carolina Tohá, quien es su hija política y perder sería una muy mala noticia. Además, Lagos tiene dos problemas específicos: su evidente lejanía con el mundo joven entre 18 y 35 años; y lo otro, es lograr alinear a la centro izquierda, porque aquellos que se identifican con ese sector sienten como más candidatos propios a Isabel Allende o Guillier que al ex Presidente,
Si Lagos decide ir, ¿no tiene competencia en su bloque?
– La participación de Lagos asegura una primaria en la NM, porque logra contener a la DC. A la DC se le haría muy difícil tratar de llegar a una primera vuelta con Lagos como candidato presidencial a diferencia de lo que podría pasar si Allende es candidata presidencial.
La DC plantea que si no van a primera vuelta los votos del centro podrían quedar en manos de candidatos fuera del bloque, ¿lo comparte?
-La DC debería ir a primera vuelta aunque genere un costo político a corto plazo, porque la DC hoy en la NM ha perdido identidad. El centro político no tiene una identidad, hoy sólo es una bisagra que permite hacer mayoría a la izquierda o a la derecha.
¿El Gobierno juega algún rol en las elecciones?
-Se está adelantando el “pato cojo”. El Gobierno ya no tiene la capacidad de controlar la agenda como lo estaba haciendo antes y va a empezar a ser cada vez menos relevante.
¿La renuncia de Ossandón a RN cuánto puede afectar a Piñera?
-Piñera es quien está mejor posicionado, pero los problemas están dentro de su coalición. Piñera va a tener más problema en alinear a Ossandón que competir con Ricardo Lagos, en una primera vuelta. En esta elección hay algo diferente que las últimas cinco: las barreras y los costos políticos de llegar a una primera vuelta han desaparecido. Hoy muchos ven en la primera vuelta una forma de construir capital político y eso antes no era necesariamente así.
Una centro derecha divida, ¿los deja sin Gobierno?
-Lo que le conviene a Chile Vamos es llegar con una sola carta para enfrentar a una centro izquierda que sí o sí va a llegar dividida, porque ME-O va a llegar a primera vuelta, porque la NM va a llegar con su opción, porque RD y la izquierda extra NM también podrían llevar una carta, a eso hay que sumarle la opción de que la DC lleve un candidato, y Andrés Velasco que se autodefine como de centro-izquierda. Esto hace más complejo el escenario de segunda vuelta porque tendríamos candidatos pasando con 20 o 15% de los votos.
¿La fragmentación e incertidumbre de cuánta gente vote es un escenario peligroso para la gobernabilidad o no?
-Es complejo, esperaría que el ciclo político le pusiera ciertos frenos a la fragmentación. Las mismas encuestas y la opinión pública va a frenar esto en la medida en que le muestre a los políticos quiénes tienen opciones reales. En Chile, sí hay riesgo de candidatos de corte más populistas o populares, por la falta de identificación que tiene hoy la centro izquierda con un candidato claro y único.
¿Cómo es eso?
-En un escenario de fragmentación y con muchos candidatos presidenciales, un Leonardo Farkas o un Alejandro Guillier pueden pasar perfectamente a segunda vuelta y eso hace que el escenario sea insospechado. (Pulso)


