El narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán, cuya extradición fue aprobada este viernes por el Gobierno mexicano, enfrenta cargos de narcotráfico, homicidio y lavado de dinero, entre otros delitos, en seis cortes de Estados Unidos, pero sólo Texas y California podrán juzgarlo. La razón es que esos dos pedidos son los únicos que fueron incluidos por Estados Unidos en el expediente de extradición.
La entrega del capo de Sinaloa no será inmediata. La defensa tiene una serie de recursos todavía a su disposición para oponerse, los cuales pueden retrasar el proceso varios meses e incluso años, de acuerdo con los abogados de «El Chapo». Primero, Guzmán cuenta con el Juicio de Amparo para inconformarse. Y en caso de que el resultado le sea adverso, lo que sigue es el juicio de revisión. Si la justicia confirma la negativa a otorgarle un amparo contra la extradición, el acuerdo queda firme. En el caso improbable de que Guzmán se viera beneficiado por la resolución judicial, la extradición se negaría.



