El diputado y exjefe de Zona Metropolitana Oriente de Carabineros, Enrique Bassaletti (independiente pro-republicano), quien asumirá en marzo, abordó el futuro escenario legislativo y presidencial. El futuro legislador respaldó el temor de la futura senadora Vanessa Kaiser (libertaria) respecto a un posible «golpe de Estado» contra el candidato José Antonio Kast si llega a La Moneda.
Bassaletti afirmó que este temor «ha ido quedando en evidencia con algunas señales», citando incidentes como jóvenes de colegios emblemáticos sentándose en andenes y el ataque con combustible a profesoras. Sentenció que «ya se echó a andar un intento» de llegar a un escenario de desestabilización, aunque advirtió que la respuesta del Estado será «realmente opuesta».
En caso de un gobierno de Kast, la respuesta del Estado se diferenciará en que las Fuerzas de Orden y Seguridad contarán con un liderazgo que estará «adelante de ellos, sin ninguna clase de complejo ni de temor», aplicando el uso legítimo de la fuerza que es monopolio estatal.
CONVERGENCIA CON EL PDG EN EL CONGRESO
Respecto a la futura composición de la Cámara de Diputados, Bassaletti se mostró «promisorio». Aunque la derecha dependerá del Partido de la Gente (PDG), el futuro diputado ve mucha más «convergencia programática» de la que se sospecha, basándose en el programa de Parisi y el contacto con militantes.
Descartó que el historial de «discolaje» del PDG se repita, ya que habrá nuevos parlamentarios y un «aprendizaje» del proceso anterior. Cree que el grueso de los diputados del PDG cerrará filas, dependiendo de cómo se manejen las conversaciones.
Consultado por la diputada Pamela Jiles, quien dijo que le haría la vida imposible a Kast, Bassaletti la calificó como un «registro outlier« de la convergencia de datos, desestimando su comentario.
RESPONSABILIDAD DE LA MAYORÍA REPUBLICANA
Con la bancada republicana siendo la más grande, Bassaletti reconoció que esto conlleva una «responsabilidad muy grande». Afirmó que, lejos de «llevarse la pelota a la casa», la mayoría debe ser prudente para convencer y llegar a acuerdos respecto a lo que le conviene a Chile y no solo al partido.
Señaló que el Partido Republicano será «muy responsable» para llegar a «acuerdos razonables», pero que no saldrán de sus «miradas más identificatorias», en respuesta a la crítica de Rodrigo Galilea sobre la necesidad de hacer política de manera distinta.
Finalmente, sobre la carrera presidencial, Bassaletti cree que ceteris paribus (si todas las condiciones actuales no se modificaran), la probabilidad de que José Antonio Kast sea elegido es «muy alta». También ve probable que parlamentarios de otros partidos, como Francisco Orrego y Camila Flores, puedan recalar en la bancada republicana. (NP-Gemini-La Tercera)



