El senador y presidente de Renovación Nacional (RN), Rodrigo Galilea, intentó moderar el tono de la discusión interna en Chile Vamos (UDI, RN y Evópoli) este miércoles, tras los resultados electorales del 16-N, que han generado un diagnóstico de crisis y llamados a la disolución del bloque. Galilea entregó argumentos que contrarrestan las críticas de figuras de su propio partido, como Cristián Monckeberg y Paulina Núñez.
El timonel de RN llamó a analizar los resultados con «frialdad», destacando la paridad electoral entre las coaliciones de la derecha. Señaló que el pacto de diputados de Chile Vamos (más Demócratas) obtuvo el 21% de los votos, mientras que el pacto de republicanos, libertarios y socialcristianos alcanzó el 23%, demostrando una cercanía «extremadamente pareja». Galilea cuestionó la tendencia a «pintar de catástrofe todo».
El senador también recordó que en elecciones anteriores, como la de concejales, RN fue el partido más votado (14%) frente al 12% del Partido Republicano, ilustrando que los resultados «van y vienen». En la elección de senadores, la votación de ambos pactos fue igualmente ajustada, con 25% y 24% respectivamente. Aunque admitió que la elegibilidad fue distinta, indicó que el sistema electoral premia ese margen superior.
En base a estos datos, Galilea remarcó que la «columna vertebral de Chile Vamos», compuesta por Renovación Nacional y la UDI, «goza de buena salud». Afirmó que ambas tiendas tienen su propio mensaje, liderazgos y representantes, y que continuarán trabajando. Respecto a Evópoli, que se encuentra en una situación compleja al no alcanzar el umbral del 5% de los votos, el presidente de RN fue cauto, señalando que están «conversando» la situación, pero «no para poner lápida», sino para generar «nuevos motores, ganas, impulso».
