A eso de las 18:00 horas de este jueves, el Estadio Santa Laura se convirtió en el escenario del cierre de campaña de la candidata presidencial Evelyn Matthei. Al ritmo de un DJ que amenizó la llegada de los asistentes, militantes y simpatizantes de Chile Vamos (UDI, RN, Evópoli), Demócratas y Amarillos comenzaron a ocupar la cancha y las graderías del recinto deportivo.
El comando de Matthei había calificado el evento como “el cierre de campaña más grande de Chile”, buscando demostrar fuerza y unidad en la recta final de la contienda electoral. Sin embargo, en la antesala y durante el desarrollo del acto, persistió la duda sobre la capacidad de convocatoria. Si bien el equipo cifró la asistencia en 10 mil personas, y posteriormente subió la expectativa a 12 mil, autoridades del sector reconocieron en privado que la cifra real se situó entre 5 mil y 6 mil. El recinto fue utilizado solo a un tercio de su capacidad, con el escenario ubicado en la tribuna marquesina.
La convocatoria se realizó en un contexto electoral complejo para la abanderada, quien figura en el tercer o cuarto lugar de las preferencias según los últimos sondeos previos a la veda, detrás de la candidata oficialista Jeannette Jara y del republicano José Antonio Kast. Esta presión ha llevado a Matthei a endurecer su discurso en los últimos días, enfocando sus ataques en el Gobierno de Gabriel Boric, en Kast, y marcando diferencias con Johannes Kaiser.
En este marco, el cierre fue concebido como una demostración de músculo político. La candidata optó por un formato definido como “popular y cercano”, con bandas tropicales como “Los Machos de la Cumbia” y “La Gran Mezcla”. La bienvenida estuvo a cargo del alcalde de Independencia, Agustín Iglesias, uno de los ediles cercanos a Matthei. La jornada también sirvió para presentar a los candidatos parlamentarios de la Región Metropolitana que compiten por el pacto que la respalda.
Cerca de las 21:00 horas, y tras un evento animado por el periodista Nicolás Larraín que incluyó la proyección de la franja electoral, Matthei subió al escenario. En su alocución, la exalcaldesa abordó propuestas clave en seguridad y economía, y lanzó duras críticas contra el Ejecutivo. Apuntó al “mayor fracaso del Frente Amplio” por su gestión en educación y la “irresponsabilidad política” del Gobierno.
En un guiño a su trayectoria, Matthei recordó su paso por el Ministerio del Trabajo durante el gobierno de Sebastián Piñera, destacando la creación de un millón de empleos. También se refirió a la tensa coyuntura de la derecha, afirmando haber insistido en una primaria amplia y una lista parlamentaria única para la oposición, poniendo el “interés de Chile por sobre cualquier interés personal”.
Respecto al balotaje, la candidata fue enfática al señalar que, aunque existe un triple empate técnico entre los tres postulantes de derecha, ella es “la única que asegura la derrota de la candidata comunista de continuidad de este gobierno”.
Entre los asistentes destacaron figuras de la coalición y colectividades de apoyo, incluyendo a los presidentes de la UDI, RN, Evópoli y Demócratas. También se hicieron presentes parlamentarios y alcaldes, algunos de los cuales habían asistido al evento de Kast días antes, generando controversia. Autoridades de los gobiernos de Piñera y el equipo más cercano de la candidata, como su jefe de campaña Diego Paulsen, también estuvieron presentes. Como dato de color, numerosos simpatizantes llegaron al estadio provistos de pelucas rubias, chalecos reflectantes y banderas, evocando el popular episodio de Matthei dirigiendo el tránsito en Providencia.
El acto concluyó con la presentación de Zúmbale Primo, el mismo grupo que había tocado días antes en el cierre de José Antonio Kast en el Movistar Arena.
PRINCIPALES HITOS DEL DISCURSO
La exministra subió al escenario cerca de las 21:00 horas, donde delineó los ejes de su propuesta y atacó duramente al Gobierno en el último esfuerzo por capitalizar el voto de derecha.
Matthei abordó la seguridad desde una perspectiva amplia, señalando que la inseguridad «no solo se vive en las calles», sino también en la «incertidumbre del que no sabe si tendrá trabajo» y en los bolsillos de las familias. Prometió devolver el «respeto» a Carabineros y a las Fuerzas Armadas bajo su eventual administración.
El diagnóstico de la candidata fue particularmente crítico con el oficialismo, al que calificó como el «peor gobierno en muchos años». Cuestionó la gestión del Frente Amplio, acusándolo de «abusar del Estado», endeudar al país y de dejar un escenario con «menos subsidios de vivienda, con más desempleo y con menos recursos para los colegios y los estudiantes» el próximo año.
La abanderada de la UDI fue implacable en su crítica al rol del oficialismo en la educación: “El mayor fracaso del Frente Amplio es haber jugado con el futuro de Chile y de nuestros niños y jóvenes. Metieron la mano en las escuelas y liceos, con inexperiencia y dogmatismo”, sostuvo, prometiendo que “la historia los juzgará de manera implacable”.
Frente a este panorama, Matthei prometió que su gestión devolverá la estabilidad económica, asegurando que el país «volverá a crecer al 4% para que las familias vivan mejor, para que haya más y mejores empleos». Para reforzar su capacidad de gestión, hizo un guiño al “piñerismo”, destacando su experiencia como economista y su labor en el Ministerio del Trabajo durante el gobierno del fallecido Sebastián Piñera, periodo en el que se crearon «un millón de empleos».
En cuanto al escenario electoral del domingo, la candidata abordó directamente la competencia interna de la derecha. Afirmó que existe un «triple empate técnico» entre ella, José Antonio Kast y Johannes Kaiser, sosteniendo que «cualquiera de los tres puede pasar a segunda vuelta». Sin embargo, la exalcaldesa marcó una diferencia fundamental con sus competidores.
Matthei reafirmó que la búsqueda de la unidad siempre fue su objetivo, recordando su insistencia en realizar una «primaria amplia de la centroderecha» y una «lista única parlamentaria» para evitar una «disputa electoral agotadora y estéril». Concluyó su discurso con un mensaje directo a sus adherentes, asegurando que «es evidente que la única que asegura la derrota de la candidata comunista de continuidad de este gobierno soy yo».
LOS ALCALDES EN DOS ACTOS
La abanderada de la centroderecha destacó su trayectoria política y sus logros concretos en cargos públicos anteriores. “Soy una mujer de derecha, que ama la libertad, cree en el trabajo bien hecho y odia la corrupción”, enfatizó. Entre sus hitos, mencionó haber liderado la reducción de la jornada de las trabajadoras de casa particular, la creación de más de un millón de empleos y la extensión del postnatal a seis meses.
El evento contó con la presencia de figuras clave de los gobiernos del expresidente Sebastián Piñera, como los alcaldes Jaime Bellolio y Sebastián Sichel. Un elemento importante de la jornada fue la asistencia de los alcaldes Gustavo Alessandri (Zapallar), José Manuel Palacios (La Reina) y Rodrigo Contreras (Paine), quienes previamente habían asistido al cierre de campaña de José Antonio Kast.
Los alcaldes, que también presiden importantes asociaciones municipalistas (AchM, Amuch y Amur), habían aclarado que su asistencia a los cierres de Kast y Matthei era un «gesto de unidad» de la derecha. En el evento de Matthei, Alessandri, Palacios y Contreras se fotografiaron con la presidenta de Demócratas, Ximena Rincón, reforzando la imagen de unidad de las colectividades que apoyan a la exministra. (NP-Gemini-La Tercera-)



