En la recta final de la intensa contienda presidencial, los candidatos han abierto una ventana a su vida menos pública, compartiendo curiosidades, gustos y hábitos personales que humanizan sus figuras en medio de debates y despliegues en terreno. Desde la fobia a un alimento hasta un coleccionismo extremo, los abanderados revelaron datos que ofrecen una perspectiva diferente antes de la votación del 16 de noviemb
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Evelyn Matthei (UDI): La candidata de Chile Vamos y la centroderecha cuenta que su película inspiradora es «Carros de Fuego», por su mensaje de disciplina y esfuerzo. Su refugio personal es el piano, instrumento que toca desde pequeña para concentrarse y encontrar serenidad antes de decisiones difíciles. Habla alemán e inglés, y sus comidas favoritas son los mariscos, especialmente los erizos.
Franco Parisi (PDG): El ingeniero comercial, en su tercera aventura presidencial, confiesa tener una relación «respetuosa» con los insectos y no mata a ninguno, al considerarlo «injusto y abusador». Parisi, quien fue cadete de la Escuela Militar, se radicó en Alabama, Estados Unidos, durante la pandemia. Su campaña de 2021 fue telemática y tuvo un costo de 13 millones de pesos. Ante la consulta sobre su ideología, responde con una mezcla de posturas: cree en la educación pública, pero también en cerrar fronteras con «minas antitanques» y personal militar.
Jeannette Jara (PC): La candidata oficialista y exministra del Trabajo es fanática de la película «El secreto de sus ojos» y su comida favorita son los porotos con riendas. Aunque le gustaría aprender a tocar guitarra, actualmente busca alivio al estrés pasando tiempo con su familia. Respecto a sus miedos, confesó que su «fobia» no es un objeto, sino el «recorte de USD 6.000 millones y al fascismo».
Marco Enríquez-Ominami (Independiente): El candidato, en su quinto intento por llegar a La Moneda, reveló su «fobia» al cochayuyo y que su deporte favorito para aliviar el estrés es jugar tenis o trotar. Habla francés e inglés, es fan de la película italiana «La Grande Bellezza», y sorprendió al confesar que usa «cintillos japoneses cuando está en casa». Su lugar favorito de Chile es Concepción, donde reside su familia.
Johannes Kaiser (PNL): El diputado, convertido en la «sorpresa» de la campaña, tuvo una juventud marcada por los cambios de residencia entre Santiago y el sur. Sus dos últimos años de enseñanza media los cursó en la Escuela Militar de Santiago, buscando formarse en el «sistema de guerra» como base para la política. Antes de ser electo diputado, trabajó en Europa como camarero, obrero de la construcción y periodista deportivo freelance.
José Antonio Kast (Republicano): El líder republicano, que va por su tercera postulación presidencial, prefiere la película «Corazón Valiente» y, al igual que Jara, tiene a los porotos con riendas como una de sus comidas favoritas (junto a la cazuela de vacuno). Para manejar el estrés, recurre simplemente a «dormir». Habla alemán e inglés, y toca un instrumento: las claves.
Eduardo Artés (Independiente): El profesor de profesión, quien enfrenta su tercera y última contienda presidencial, llegó a Santiago a los 14 años, tras vivir su infancia en El Tambo, O’Higgins. Además de ser profesor y dirigente social, es soldador al arco y obrero metalúrgico. Militó en el extinto Partido Comunista Revolucionario (PCR) desde los 15 años. Artés reveló que no tiene auto ni sabe manejar porque «nunca le alcanzaron las lucas», y sus traslados de campaña a veces los realiza con la ayuda de «algún compañero». En 2013, fue invitado por dos semanas a Corea del Norte por el Partido del Trabajo.
Harold Mayne-Nicholls (Independiente): El exdirigente deportivo confiesa ser «coleccionista de esto, aquello y de un cuánto hay. Casi rayando en el mal de Diógenes». Sus películas favoritas son «El Padrino», «Los cowboys» y «El Bueno, el malo y el feo», y su receta contra el estrés es «tratar de no estresarme». Juega fútbol todos los sábados, lo que equivale, según él, a «ir al psiquiatra». (NP-Gemini-Emol)
