Un ataque perpetrado en una sinagoga del norte de Inglaterra dejó un saldo de dos personas fallecidas y tres gravemente heridas, según confirmó la policía el jueves. El incidente tuvo lugar en la Sinagoga de la Congregación Hebrea de Heaton Park, en Crumpsall, y se produjo durante la observancia de Yom Kipur, el día más sagrado del calendario judío. La Policía de la región de Mánchester indicó que el sospechoso del ataque, que involucró el uso de un vehículo y un apuñalamiento, se cree que también está muerto tras ser abatido a tiros por los agentes. El alcalde del área metropolitana de Mánchester, Andy Burnham, aunque sin confirmación absoluta de la muerte del agresor, afirmó a BBC Radio Manchester que la situación «no es un incidente en desarrollo o en curso».
La alerta a la policía se produjo poco después de las 9:30 de la mañana, tras el aviso de una persona que presenció cómo un coche arremetía contra la gente y a un hombre siendo apuñalado. Minutos después, agentes armados respondieron con varios disparos, alcanzando a un hombre que se considera el atacante. Como parte de la respuesta de emergencia, la policía declaró el protocolo nacional «Plato», clave para la respuesta a un ataque en curso, aunque se aclaró que esto no implica una designación inmediata como incidente terrorista. Adicionalmente, expertos en explosivos se encuentran investigando si el agresor portaba algún dispositivo.
El primer ministro Keir Starmer expresó estar «horrorizado» por el ataque y se desplazaba de vuelta desde una cumbre de líderes europeos en Copenhague para presidir una reunión del comité de emergencia del gobierno. Starmer lamentó en la plataforma X que el hecho de que el ataque haya ocurrido en Yom Kipur, «lo hace aún más espantoso», y anunció un mayor despliegue policial en sinagogas de todo el Reino Unido. Dave Rich, de la Community Security Trust, organización que monitorea el antisemitismo en el país, destacó la particular gravedad del suceso al ocurrir en el día más solemne del año judío, cuando las sinagogas están completamente llenas, subrayando que durante todas las festividades importantes existe una «operación de seguridad significativa» entre la policía y la comunidad judía. Mánchester ya fue escenario del atentado suicida más mortífero de Reino Unido en años recientes, ocurrido en un concierto de Ariana Grande en 2017. (NP-Gemini-Emol-Agencias)



