El Segundo Juzgado de Garantía de Santiago acogió el procedimiento monitorio contra Magdalena Piñera, hermana del Presidente Sebastián Piñera, por incumplir las medidas sanitarias dispuestas por la pandemia del covid-19, al asistir sin el permiso requerido al funeral de su tío, el obispo Bernandino Piñera, ocurrido el 1 de junio.
Ante ello, el tribunal la condenó al pago de una multa de 6 UTM -aproximadamente $304.044- a beneficio de las arcas fiscales.
Sin embargo, se le otorgó el beneficio de suspensión de la sanción por seis meses considerando sus «antecedentes favorables» y el contexto de los hechos.
«Ahora, en conformidad a lo previsto en el artículo 398 del Código Procesal Penal, con ocasión de que concurren antecedentes favorables que no hacen aconsejable la imposición de la pena, lo que se traduce en la naturaleza del hecho investigado, el contexto en que éste ocurrió, a saber, con ocasión de la pérdida de un ser querido por parte de la imputada, la baja entidad del mismo, a lo que se suma que la requerida tiene a su edad una irreprochable conducta anterior, se decreta la suspensión de la pena impuesta y sus efectos por el término de seis meses», se lee en la resolución.
De esta forma, si la imputada no es objeto de un nuevo requerimiento o formalización, se dejará sin efecto la sentencia y dictará, en reemplazo, el sobreseimiento definitivo de la causa.
De acuerdo a lo expuesto por la fiscalía Centro Norte, los hechos ocurrieron a eso de las 16:00 del 1 de junio cuando Magdalena Piñera, «sin contar con un permiso de desplazamiento válidamente otorgado», concurrió hasta el cementerio Parque del Recuerdo para el funeral del ex arzobispo de La Serena.
De esta forma, aseguró el persecutor José Morales, infringió «las medidas adoptadas por la autoridad de gobierno, por ende poniendo en peligro la salud pública«.
Cercanos al caso señalaron que el resto de los asistentes sí contaban con el documento requerido, mientras que el Presidente cuenta con autorización por ley.
El hecho generó en su oportunidad una serie de cuestionamientos, considerando además la cantidad de personas que llegó a la despedida del obispo.
Ante ello, el ministro de Salud, Enrique Paris, como la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, aseguraron que los protocolos dispuestos para funerales covid-19 se cumplieron en el caso, criticando además la «instrumentalización» de la situación. (Emol)


