El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, aseguró esta tarde que «La Presidenta nos ha instruido que el tema de la educación y avances en gratuidad son prioritarios, y por lo tanto avances en otras cosas se tendrán que demorar un poco más».
El titular de la cartera expuso esta tarde sobre el proyecto de ley de educación superior en la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, donde explicó que lograr la gratuidad universal implica recursos de US$3.600 millones, es decir, 1,6% del PIB.
Consultado sobre la meta de llegar a esto el año 2020, Valdés explicó que «La realidad nos ha llevado a tener que calibrar esa ruta, por dos motivos: los ingresos del fisco han sido menores de lo que se estimaba cuando se analizó este tema».
El segundo motivo tiene que ver con los proyectos de ley ya avanzados «específicamente el avance de terminar el copago y la carrera docente que implicaron un gasto significativamente mayor a lo que se presupuestó inicialmente y por lo tanto los recursos son escasos».
El ministro dijo entender la tensión por ir más rápido que algunos les gustaría pero que «estamos destinando muchísimo, entonces ir más rápido sin tener más recursos implica al final del día comprimir otros gastos de una manera que puede ser ineficiente o políticamente imposible».
Frente a la meta de llegar a cubrir el 60% de la gratuidad en este Gobierno indicó que «Vamos a lograrlo financiar, eso requiere un montón de esfuerzo del resto de los gastos fiscales, no es una decisión fácil». (Emol)
