Sol Serrano y decisión de Historia como optativo: «Me desconcierta y me...

Sol Serrano y decisión de Historia como optativo: «Me desconcierta y me llena de dudas»

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Historia como optativo en Tercero y Cuarto Medio. Ese fue uno de los cambios que anunció el Consejo Nacional de Educación (CNED), luego de tres años de trabajo, para el nuevo currículum de estos dos niveles. De esta forma, los alumnos tendrán seis ramos obligatorios (Lengua y Literatura, Matemáticas, Educación Ciudadana, Filosofía y Ciencias para la Ciudadanía) y podrán optar a 27 cursos optativos.

El nuevo diseño, que se comenzará a implementar el próximo año en 3° medio y el 2021 en 4° medio, ha sido criticado por académicos y específicamente por historiadores debido a que el curso se reemplaza por el ramo de Educación Ciudadana que será impartido por profesores de Historia.

Sol Serrano, Premio Nacional de Historia 2018, dio sus primeras impresiones sobre el cambio de currículum y a través de correo electrónico entregó su opinión a La Tercera PM. “La elaboración del nuevo currículum ha sido una tarea larga en que han trabajado equipos competentes de dos gobiernos distintos. Detrás de esta proposición debe haber un razonamiento que no conozco y por lo cual no puedo argumentar de forma justa y razonada. Sin embargo, el cambio de la disciplina de historia en los dos últimos años por Educación Ciudadana es un impacto que como primera reacción me desconcierta y me llena de dudas. Pero nuevamente no sabemos cuál es el contenido de aquella nueva asignatura“, comenta.

Asimismo, Serrano muestra su preocupación por cómo se abordará la educación cívica. “Sin embargo, sabemos que (Educación Ciudadana) estará a cargo de los profesores de historia. Ello puede ser una buena señal. Ello significa hacerse cargo de la orientación en la formación de los futuros profesores de historia y de aquellos en ejercicio. Y nosotros los profesores universitarios debemos estar atento a ese cambio”.

“Sea como sea, la formación ciudadana no puede ser como la antigua educación cívica, que era básicamente derecho constitucional, sino que debe comprender muchas dimensiones. La jurídica por cierto, pero muy principalmente la histórica porque la ciudadanía lejos de ser una abstracción, es una construcción histórica que ha sido muy difícil y es muy nueva en su sentido democrático. ¡Qué son 200 años! Si esa formación no esta encarnada en la acción de sujetos históricos, pierde su mayor valor que es que los alumnos se sientan parte de esa construcción y por lo tanto comprometido con los principios básicos de la convivencia social. Espero que sea así“, cierra la Premio Nacional de Historia.

La ministra de Educación, Marcela Cubillos, por su parte, salió a abordar este punto durante la mañana en un hilo de Twitter.

En tanto, el decano de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile, Carlos Ruiz, advierte que solo conoce la información del cambio que se dio a conocer hoy. “Es positivo en esta primera lectura que se confirma la obligatoriedad de la filosofía, por el carácter crítico que la disciplina conlleva. Pero me parece crítico que se quite la obligatoriedad a historia, porque los estudiantes requieren herramientas para entender el presente que está sujeto a cambios enormes que vive el mundo en este momento“, comenta. “Por último, habría que imaginar para lo que sigue, conexiones entre el consejo y las universidades y quiénes son los formadores de profesores. Esto nos obliga a repensar las disciplinas y la formación de profesores”, agrega Ruiz.

En la misma línea, la historiadora María José Cumplido valora que se agregue Filosofía y Educación Cívica como ramos obligatorios pero lamenta la decisión de dejar a la Historia como optativo en los cursos finales de la educación media.

“Entiendo que la decisión puede ser por la PSU pero enfocar la educación a una prueba estandarizada y por eso borrar contenidos o dejar de pasar otros relevantes para cualquier ciudadano, creo que es un sesgo. Un sesgo importante porque es ver la cosmovisión del mundo desde una perspectiva muy particulares y ahí uno deja de ver las cosas de manera más objetiva y desde otro punto de vista. Es un poco como arrinconarse en un nicho que puede ser la Historia o la Ciencia”, comenta Cumplido.

“Mi idea de educación tiene mucho más que ver con integrar contenidos y justamente con hacer relaciones. Aprender que la Historia está conectada con la Ciencia, están conectadas con la Filosofía, y que no son elementos que se entiendan por separado. Y al forzar esta separación me parece que uno como persona, estudiante y ciudadano empieza a perder todas esas relaciones que hacen mucho más rico el entender el mundo“, agrega.

Por su parte, Jorge Baradit, historiador y escritor de libros sobre historia de Chile, apunta sus dardos hacia la “destrucción del concepto de ciudadano”. “Esta es una decisión más de gobiernos tecnócratas hacia la destrucción de la educación como la formación de la persona. La educación debe tender a construir una mejor persona no un técnico operador aunque sea de primer nivel. La Historia es la base para la identidad y esa identidad construye persona política, y esa persona es la que opera en la sociedad buscando un mejor destino, presionando en un sentido o en otro, construyendo país desde abajo“, señaló.

La aclaración del CNED

El presidente del Consejo Nacional de Educación (CNED), Pedro Montt, pide clarificar que el ramo de Historia no desaparece, sino que queda integrado en tres asignaturas de profundización (Comprensión histórica del presente; Geografía, territorio y desafíos socioambientales; y Economía y sociedad), y que además está de cierta forma vinculado al ramo de Educación Ciudadana, que puede ser impartido por los mismos docentes de Historia.

“El ramo de Educación Ciudadana está establecido por ley para 3° medio y 4° medio, por lo que acá se está cumpliendo la ley. Sus contenidos están relacionados con una visión moderna de la ciudadanía, que no es solo el conocimiento de las instituciones y su funcionamiento, sino que también el fomento de la participación. Y ahí hay elementos de Historia, porque son materias concomitantes”, explica.

Cuando se dice que desaparecerá Historia, se confunde todo, porque estamos hablando de la formación común, no de las asignaturas de profundización. Habrá un pool de asignaturas a desarrollar en cada campo del saber. Será una formación más profunda y la gracia es que haya más opciones para los estudiantes”, agrega.

De esta forma, uno de los impactos de esta nueva estructura de asignaturas será la desaparición de la tradicional división de los escolares entre “humanistas”, “biólogos”, “químicos” y “físicos”, pues los estudiantes podrán tomar ramos de profundización en cualquier área.

Y según Montt, la nueva estructura no debiera derivar en que sobren profesores de Historia, porque ellos pueden hacer el ramo de Educación Ciudadana, sino que podrían faltar docentes de Filosofía y Ciencias en los colegios técnicos-profesionales, pues ahí esos ramos ahora serán obligatorios. Pero advierte que todo depende de la administración de recursos que haga cada colegio.

“En la medida en que se utilicen los recursos disponibles, no debiera haber problemas. Se diversificará las oportunidades, pero con los recursos que tenemos, porque los profesores son especialistas y podrán implementar esto. Estamos estableciendo objetivos de aprendizaje, que son parte de los saberes que manejan los profesores. No estamos inventando algo que no sepan”, puntualiza.

La Tercera/Agencias

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