Un confuso ataque al interior de un hospital de la ciudad de Ostrava, al este de República Checa generó la inmediata evacuación del lugar. La Policía informó de al menos seis personas fallecidas después que un sujeto comenzara a disparar en una zona de espera del recinto hospitalario.
El autor del ataque, que ocurrió a las siete de la mañana, se fugó en un primer momento hasta que la Policía dio con su cadáver. Según informaron, el atacante se suicidó luego de efectuar los disparos. «Hemos hallado al agresor. Este hombre de 42 años se disparó un bala en la cabeza, antes de que la policía entrara en acción. Ha muerto» sentenciaron.
El ministro de Interior, Jan Hamacek, confirmó lo ocurrido, al tiempo que la policía difundió en Twitter una foto de un sospechoso, un hombre pelirrojo vestido con una chaqueta roja, foto que luego retiró, para indicar que la imagen era de un presunto implicado en el tiroteo, al que en un mensaje posterior se refirió como un «testigo» de lo ocurrido. (DW, efe, afp)
