A las 07:52 horas y abordo de un vehículo Mercedes Benz llegaron hasta el anexo cárcel Capitán Yáber, María de la Luz Chadwick y Verónica Méndez, las esposas de los controladores de Penta, Carlos Lavín y Carlos Délano, repectivamente, para visitarlos por primera vez desde que quedaron en prisión preventiva el sábado.
Pese a que estuvieron más de una hora frente a las puertas del recinto penitenciario, no emitieron declaraciones y sólo se limitaron a exigir «respeto» a los periodistas que se acercaban a hacerles consultas.
Pasadas las 09:00 horas y una vez que ambas mujeres ya estaba en el interior del lugar, llegaron los hijos de Carlos Eugenio Lavín. Uno de ellos llevaba consigo una bolsa con frazadas, ropa, papel higiénico, te y café, entre otras especies, con las que ingresaron en completo silencio.
También arribó hasta Capitán Yáber la madre del ex subsecretario de Minería, Pablo Wagner, quien llevaba consigo una bolsa con bebidas y otros alimentos. Asimismo, un hombre que se identificó como cercano a Carlos Alberto Délano criticó la medida cautelar de prisión preventiva resuelta el sábado para los involucrados en el caso y recordó que el empresario, si bien «cometió un error», «regaló 400 escuelas para el terremoto y no sé cuántos millones a la Teletón y que tontamente, vaya a saber uno, se metió en este lío».
Las visitas están permitidas hasta el mediodía de este martes; entre las 14:00 y 17:00 horas del jueves y entre las 9:00 y las 12:00 del domingo. Pese a que las defensas de los acusados ya presentaron sus respectivas reclamaciones ante la Corte de Apelaciones para intentar revertir la prisión preventiva, los alegatos recién se realizarían entre el viernes o sábado de esta semana, considerando que se debe hacer cumplir el plazo de apelación, que vence este jueves. Según informó hoy el diario Pulso, los abogados de Délano y Lavín apuntaron en su apelación a la «edad avanzada» y el «compromiso social» de los empresarios para lograr que recuperen su libertad. «Nuestros representados son hombres de edad avanzada (67 y 72 años respectivamente), ambos casados, con hijos y nietos. Han tenido una exitosa y extensa trayectoria laboral, durante la cual nunca dejaron de lado el plano social», dice la reclamación.(Emol)
