Pablo Granifo descartó influencia de Luksic en crédito a Caval

Pablo Granifo descartó influencia de Luksic en crédito a Caval

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Han pasado 14 años desde que Pablo Granifo Lavín ingresara a trabajar al Banco de Chile. En 2009 pasó a ocupar uno de los puestos claves dentro de la institución: la presidencia del directorio de la entidad financiera del Grupo Luksic.

El organismo ha estado en el ojo del huracán desde febrero, tras conocerse públicamente que aprobó un crédito de $ 6.500 millones para la empresa Caval, que en un 50% es propiedad de Natalia Compagnon, nuera de la Presidenta Michelle Bachelet. Con el dinero obtenido, la firma pudo comprar tres terrenos en la comuna de Machalí, VI Región, que después revendió en $ 9.500 millones.

Durante la gestión de este crédito, se llevó a cabo una reunión entre la esposa de Sebastián Dávalos y Andrónico Luksic, dueño del banco. Por estos motivos es que el fiscal Luis Toledo, que indaga la existencia de presuntos delitos en el negocio realizado por Caval, citó a declarar a todos los funcionarios del banco que tuvieron algún grado de participación en la gestión del préstamos. Además de Luksic, el mismo Granifo tuvo que entregar su testimonio.

El ingeniero comercial llegó a la Fiscalía Regional de O’Higgins el 13 de mayo, a las 10.30 horas, para prestar declaración, al cual tuvo acceso La Tercera. “En cuanto al crédito a Caval, lo autoriza un comité, en el que estaba yo, el gerente general Eduardo Ebensperger y Claudia Herrera, que es gerente del área metropolitana. Ellos me convocaron a mí para ver la operación de crédito. Me llamaron a mi oficia”, dijo Granifo al fiscal Toledo.

El investigador preguntó sobre la necesidad de que él tomara o no la decisión de otorgar el crédito, a lo que Granifo contestó “lo podía haber resuelto Eduardo (Ebensperger) con el gerente general, pero como era PEP (Persona Expuesta Políticamente) se escalaba a un nivel superior y por ello se convocó al presidente del banco”. 

Posteriormente, el fiscal le consultó sobre los criterios para calificar a una persona de PEP. “Hay listas de PEP y hay criterios para calificar. En esa época como era el hijo de una ex Presidenta era PEP”, dijo el profesional.

Luego, el presidente del directorio expuso las potencialidades de los terrenos que compraría Caval en Machalí, por lo que, declaró, finalmente se optó por aprobar el crédito.

Sobre sus apreciaciones del negocio y las fuentes de pago para sostenerlo, indicó que “estimé que este predio se vendería el siguiente año calendario y con ello se pagaría el crédito. Era esperable dado que este predio tenía cuatro hectáreas a orilla de carretera que ya eran urbanas, y era posible que el resto fuera urbano en el futuro”, señaló.

Toledo, según quedó plasmado en la declaración, le consultó sobre la importancia del vínculo de Bachelet con Compagnon. “Estábamos conscientes de que era la nuera de la Presidenta, pero ello no me hacía gran diferencia, pues ella ya estaba catalogada como PEP. Por ejemplo, entiendo hay 14 mil PEP, y ocho mil son clientes nuestros. Para ilustrar las dimensiones de esto. Hago presente que si se hubiera avizorado algo como esto, no estaríamos aquí”, sentenció Granifo.

Sobre el rol de Luksic, el ingeniero dijo que si bien sabía de la reunión con Compagnon, él no intervino en la emisión de los $ 6.500 millones para Caval, el cual salió desde el comité de créditos: “No hablé con don Andrónico de esto. El no intervino, no participa en los comités (…) No se habló de ninguna llamada de la Sra. Bachelet”.

En la declaración de Luksic a la fiscalía, éste reconoció que sostuvo “siete u ocho reuniones más con Compagnon”, después de otorgado el crédito, incluso se discutió sobre la posibilidad de entablar negocios entre Caval y CCU, también de propiedad del Grupo Luksic. Granifo, según relató a Toledo, esto no lo sabía. “Me enteré después de esos negocios de CCU (empresa de la cual soy director hace dos años aproximadamente) con Natalia Compagnon. Supe porque hoy es de público conocimiento”.

El costo de vincular el Banco de Chile con Caval no sólo trajo consideraciones financiera, sino que también de imagen. Así lo señaló el mismo Granifo: “Desde el punto de vista reputacional es malo, muy malo. Ese ha sido el gran costo de esta operación. Como prestadores de servicio, la imagen es muy importante”.

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