Nuevo gobernador de Iquique fue demandado por acoso laboral y sexual

Nuevo gobernador de Iquique fue demandado por acoso laboral y sexual

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Este viernes fue ratificado como nuevo gobernador de Iquique el ingeniero comercialRodrigo Guagama, quien hasta antes de ser oficializado se desempeñaba como gerente general de la Corporación de Desarrollo Productivo de Tarapacá, y cuyo representante legal y presidente es el actual Intendente de la región, Miguel Ángel Quezada.

Sin embargo, la nueva autoridad llega con un flanco abierto hasta las dependencias de la Gobernación de Iquique, luego que en junio de este año fuera interpuesta una demanda por vulneración de derechos en contra de dicha corporación, en la que se formulan cargos por acoso laboral y sexual que lo involucran directamente.

HECHOS

Según la demanda, los hechos ocurren a partir del 15 de noviembre de 2018, cuando la afectada ingresó a trabajar bajo la subordinación de la Corporación de Desarrollo Productivo de Tarapacá como ejecutiva de proyectos, siendo Rodrigo Guagama su jefe directo.

«De manera inmediata ingresa a una especie de grupo privilegiado en la corporación, que son alrededor de cinco personas, que va de la mano del grupo del Gobierno Regional, de confianza, muy hermético, aunque mi representada no es política. Ella ingresa a hacer su pega. Ella señala que en un principio le parecía raro que tenían que hacer las reuniones fuera de la corporación, pero ella viene del sur y no se lo cuestionó mucho e hizo lo que tenía que hacer», manifestó a Cooperativa RegionesPaula Jara, abogada de la demandante.

A medida que transcurrió el tiempo, y luego que la afectada fue «ganando ciertos desafíos», como por ejemplo el presupuesto de la corporación de ese año, se le dieron más atribuciones, y de forma natural, una relación laboral más estrecha con Guagama, período en el cual comenzaron las insinuaciones de índole sexual hacia su persona.

«Se empiezan a generar una serie de situaciones en donde Rodrigo comienza a insinuarse pero de forma muy tosca, muy grotesca, por ejemplo, haciéndole comentarios sobre su pantalón blanco, a sus uñas largas, a su perfume, a su pelo. La llama muchas veces a cafés para que estuvieran solos, la llama a la oficina para que trabajen en reuniones solos«, indicó Jara.

«La situación más crítica se dio, cuando él se acerca a la oficina un día «normal» dentro de la semana, y en un contexto muy informal y sin un sentido en la conversación que establecía, él me consulta si trabajaría de prostituta, situación que me dejó descolocada y sin saber qué tipo de respuesta dar. Frente a esa situación mayor, acudí a mi psicóloga, para que me diese contención profesional y herramientas de manejo de situaciones, como la que me había tocado vivir», detalla la demanda.

MALTRATOS

De manera paralela a las insinuaciones, Jara comentó que su representada comenzó a evidenciar los maltratos que, a través del grupo privilegiado al mando de la corporación -incluyendo a Guagama-, le daban a otros funcionarios de la institución.

«Eso también es bastante fuerte porque ella dice que no le afectó, pero después sí porque en un momento ella señala que encierran a una trabajadora que les caía mal a todos, estando esta persona embarazada«, sostuvo la abogada.

Los malos tratos también se dejaron ver a través de un grupo de Whatsapp denominado «5G», donde participaba la demandante, Guagama y otros, en cuyas conversaciones se denostaba a otros funcionarios.

De hecho, parte de la demanda señala: «Ya con el paso del tiempo, a mediados del 2019, este tipo de situaciones irregulares tuvieron una periodicidad diaria, donde tan solo no era el acoso realizado por el Gerente, sino que se sumaban lo comentarios con mucho uso de palabras groseras, por parte del resto del equipo de confianza burlándose constantemente del resto de los compañeros que ciertamente no estaban dentro de este grupo, las descalificaciones eran de índole laboral como privado (…) Yo fui testigo de gritos, insultos y otras situaciones desagradables que iban desde la gerencia o con la venia de ésta«.

AUTODESPIDO

A raíz de estas situaciones, y luego que la afectada rechazara en varias oportunidades a Guagama, comenzó un proceso de alejamiento que la gerencia notó.

«Todo eso fue generando una mella en perjuicio de la trabajadora. Ella empieza a salirse de este grupo porque empezó a rechazar este trato, y ahí la empezaron a acosar a ella, la empezaron a aislarla dejaron de incluir en funciones laborales, finalmente quedó botada en una oficina que era un archivador, y ahí toma la decisión de autodespedirse», declaró Jara.

Según consta en la demanda, estos hechos fueron denunciados por la víctima el pasado 4 de mayo de este año, señalando lo siguiente:

«Presenté carta de autodespido por incumplimientos graves por parte de mi empleador que hicieron imposible la continuación de mis labores en la empresa denunciada, la principal vulneración fue el hostigamiento laboral que recibí posterior a los rechazos por mi parte hacia don Rodrigo Guagama, gerente general de la Corporación, por el acoso sexual del cual fui víctima, denuncia que realicé con fecha 04 de mayo de 2020 a mi empleador a través de correo electrónico, debido a que de forma reiterada, el gerente general, abusó de su posición de jefatura para hacerme requerimientos e insinuaciones de índole sexual, las cuales finalmente rechacé para luego ser objeto de hostigamiento laboral», establece el recurso laboral.

Consultados por esta situación, desde la Corporación de Desarrollo Productivo de Tarapacá declinaron hablar del tema señalando que «hay un proceso judicial en curso». En tanto, desde la Intendencia manifestaron que no se referirán.

Por último, Jara señaló que la audiencia preparatoria en donde se presentará toda la prueba del caso, será este próximo 25 de noviembre. (Cooperativa)

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